Germán Cáceres, en la audiencia de ampliación de su versión que se dio en La Roca, en Guayaquil, la mañana de este jueves 12 de enero, dijo que estranguló a María Belén Bernal tras una discusión y afirmó que estaba "solo y borracho" en el momento de la agresión. Esto según el abogado Jesús López, defensor de la familia de la víctima.

Nathaly Salazar, abogada y experta en derecho penal, señaló que el hecho de que Cáceres haya cambiado la versión que dio en un inicio no representa consecuencias jurídicas en su contra, sino que evidencia que no hubo colaboración con la justicia y eso “disminuye las posibilidades de que existan medidas atenuantes para la imposición de su condena”.

Salazar enfatizó que hay que tomar en cuenta "un pequeño detalle" que el procesado indicó durante su confesión: que cometió el crimen en estado de ebriedad. Según la jurista, con este escenario la defensa de Cáceres puede alegar, en la audiencia de juzgamiento, que el exoficial estuvo en estado de inconsciencia cuando cometió el femicidio de Bernal.

"Con esto se puede argumentar la posibilidad de un grado de inimputabilidad, es decir que se exima de cierta responsabilidad penal al procesado por no poder comprender cómo se cometió el delito", señaló.

Sin embargo, explicó que en este caso no se aplicaría porque se debe revisar el nivel de ebriedad que tuvo el exteniente para que su nivel de conciencia haya estado completamente disminuido. “Cáceres tuvo tiempo de embalar el cuerpo, de modificar la escena, de borrar evidencias, de enterrar el cadáver... Eso no lo hace una persona en estado inconsciente”, agregó.

El abogado López, por su parte, aseveró que durante la audiencia, el procesado faltó a la verdad en varias ocasiones y que lo revelarán luego de que culmine la instrucción fiscal del caso, este domingo 15 de enero.