El alcalde de Santa Elena vivio 50 minutos de terror

Seis sujetos encapuchados y que vestían ropa negra ingresaron (cerca de las 02:30 de ayer) al domicilio del alcalde de Santa Elena, Dionicio Gonzabay Salinas, ubicado en una ciudadela privada en la vía La Libertad-Salinas.

Los maleantes llegaron hasta el dormitorio donde descansaba la autoridad municipal junto a su esposa y sus dos pequeños hijos, los maniataron y les colocaron pedazos de cinta en la boca para evitar que pidan auxilio.

Cincuenta minutos habrían permanecido los antisociales en el lugar mientras buscaban dinero y joyas por todo el inmueble. “¿Dónde está la plata?, ¿dónde hay más joyas?, eran los gritos de los maleantes”, manifestó el alcalde.

Los sujetos utilizaron armas de fuego para amedrentar constantemente a las víctimas. En un descuido, Gonzabay intentó agarrar su celular para oprimir el botón de pánico, pero los pillos se dieron cuenta y destruyeron el dispositivo de una fuerte pisada.

“Si denuncias a la policía y Fiscalía, ya verás lo que te va a pasar”, habría sido otra de las amenazas de los pillos, según reveló la autoridad municipal, quien al mediodía de ayer presentó la denuncia en la Fiscalía junto a su abogado.

Quince minutos después de que los sujetos abandonaron la vivienda, el alcalde logró desatarse y pidió auxilio. Según el parte, los delincuentes se llevaron 7.000 dólares, joyas valoradas en 5.000 dólares, una laptop y celulares.