
Ocho zonas en Quito fueron intervenidas para evitar deslizamientos y desbordamientos
Para evitar las emergencias el Municipio trabaja en taludes, quebradas y ríos de ocho parroquias. Conoce los detalles
El Municipio de Quito, a través de la Empresa Pública Metropolitana de Seguridad (EMSeguridad), ejecuta actualmente nueve obras de mitigación en distintas zonas del Distrito Metropolitano, con una inversión que supera los $ 4 millones. Estas intervenciones tienen como objetivo principal reducir riesgos en sectores identificados como vulnerables ante deslizamientos, erosión y desbordamientos de quebradas.
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Emergencias por lluvias
Las obras, que se desarrollan tanto en áreas urbanas como rurales, incluyen la construcción de muros de contención, estabilización de taludes, canalización de aguas lluvias y corrección de cauces naturales. Según la entidad, estas acciones permiten evitar emergencias que puedan afectar a las familias y su entorno.
Actualmente, los trabajos se concentran en ocho parroquias: Calderón, Chillogallo, San Juan, Pomasqui, Puengasí, Itchimbía, Centro Histórico y La Libertad. En estos sectores, las labores avanzan con distintos enfoques técnicos, adaptados a la geografía y niveles de riesgo de cada sitio.
En Calderón, en el norte, se realiza la estabilización de taludes en el barrio La Capilla, mediante la instalación de geomembranas, anclajes y muros de contención para evitar colapsos. En Chillogallo, en el sur, se construyen muros cajón y pantallas de piedra con el objetivo de detener el avance de la erosión en La Libertad.
En el Centro Histórico, en cambio, se levantan muros de hormigón y obras de drenaje en laderas cercanas a las zonas pobladas de El Panecillo y Santa Lucía Baja. Además, se niveló el terreno en San Juan, en el sector de Yaku II, y se realizaron perforaciones para la instalación de anclajes.
Entre las zonas de atención prioritaria se encuentran Pomasqui y el río Machángara, debido al alto riesgo que representan.
Obras en el río Monjas
En Pomasqui, los deslizamientos registrados en 2024 provocaron un retroceso de 25 metros en un talud que ahora se encuentra a solo cinco metros de la vía de acceso a La Pampa. Para contener la amenaza, se ejecuta una obra de gran envergadura que contempla la colocación de 7.000 m³ de enrocado, 560 metros de pilotes de acero y la rectificación del cauce del río Monjas.
En el río Machángara, específicamente en las parroquias Itchimbía y Puengasí, se iniciarán en los próximos días tres frentes de trabajo a lo largo de casi un kilómetro. La intervención comprende la construcción de muros de gaviones, instalación de geomantos reforzados y levantamiento de muros de hormigón. Esta obra tiene una proyección de ejecución hasta inicios del año 2026.
Según la entidad, todas las obras se financian con recursos provenientes de la Tasa de Seguridad Ciudadana, que se canaliza hacia el Fondo Metropolitano de Gestión de Riesgos. Este mecanismo permite ejecutar trabajos estratégicos que refuerzan la capacidad de prevención ante eventos naturales extremos.