Durante un operativo de control en las parroquias rurales de Pifo y Yaruquí se retiraron 2.317 libras de productos cárnicos que al no contar con la documentación correspondiente de transporte y faenamiento, se presume que provienen de camales clandestinos de la zona. 

La Agencia Metropolitana de Control (AMC), el Cuerpo de Agentes de Control Metropolitano y la Empresa Municipal de Rastro inspeccionaron 15 tercenas. 

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Allí, las autoridades verificaron las Licencias Únicas para el Ejercicio de Actividades Económicas (LUAE), así como la documentación relacionada con el transporte, certificados de rastro y, principalmente, la guía de faenamiento.

El Municipio de Quito informó el 5 de abril de 2024 que se iniciaron tres procedimientos de sanción a los establecimientos que no presentaron la documentación correspondiente a su actividad económica.

La guía de faenamiento es un documento que garantiza que los productos cárnicos provienen de camales oficiales, donde se cumplen los protocolos sanitarios y se realiza una verificación exhaustiva del estado de salud de los animales por parte de veterinarios calificados.

La información recalca que en camales clandestinos, donde las condiciones pueden ser precarias y las prácticas no están reguladas, los animales experimentan un mayor estrés durante el proceso de faenamiento, lo que también puede tener repercusiones negativas en la salud del consumidor final.

Por otro lado, de los 15 establecimientos inspeccionados, dos sí tenían las condiciones de higiene adecuadas y presentaron la documentación respectiva.

Esto asegura la calidad e inocuidad de los productos que llegan a la mesa de los consumidores. 

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