Impactada, una vez más, por los sucesos en Afganistán, por las descripciones recordando el atentado del 11 de Septiembre, por nuestros terremotos y los niños venezolanos en las calles de Guayaquil.

Desde niña, el Diario de Anna Frank me dejó una huella imborrable, así como mis pasantías en Francia, estudiando Psicopedagogía, con niños afectados por trastornos psiquiátricos o de aprendizaje, delincuencia juvenil, secuelas de parálisis, retardo mental, autismo y prostitución infanto-juvenil. De vuelta en Ecuador, mi trabajo con el Min. de Bienestar en el Centro de Rehabilitación Femenino, la creación de Fasinarm y la carrera de Pedagogía Terapéutica en la U. de Guayaquil, las experiencias nacionales a través del Innfa, de niños en vulnerabilidad extrema, mantienen mi sensibilidad al respecto.

También detonó el tema la reciente lectura de Marjane Satrapi en Persépolis, cómic que relata con sabiduría, humor y drama sus memorias creciendo en Irán durante la Revolución Islámica. Para algunos críticos, Persépolis devolvió cierta esperanza en la humanidad. Hoy sostengo que a nuestra especie le falta aún mucho por evolucionar.

La U. Casa Grande se sumó al terremoto de Manabí, trabajando con familias y niños, publicando 3 libros, uno con cuentos de los propios niños, presentado en la FIL 2016 y otro distribuido con el programa de televisión municipal Aprendamos.

Hoy, diseñando nuevas carreras en Psicología y Educación, reviso investigaciones contemporáneas, desde los años 2000. Ana Freud, mucho antes, ya marcó hitos en la comprensión de problemas conductuales/emocionales de niños huérfanos liberados del campo de concentración de Terezín. Posteriormente, en EE. UU., Canadá, Europa y Australia se sigue investigando las consecuencias de las adversidades extremas en niños y jóvenes, buscando prevenir o reducir los efectos. Estos estudios incluyen guerras, terrorismo, accidentes industriales, desastres naturales (tsunamis, huracanes, terremotos), grandes incendios… sin olvidar Chernóbil.

Próximamente expondré los hallazgos contemporáneos con enfoque ecológico/comprehensivo, neuropsicológicos y resiliencias.