Hace un año exacto, los gestores culturales mexicanos Alí Cotero y Adriana Flores se unieron a la galerista quiteña Gabriela Moyano para plantear una muestra conjunta cuyo objetivo era el diálogo, la coexistencias entre dos realidades del arte contemporáneo.

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Así nace Vestigios metabólicos, una exposición colectiva que reúne piezas de quince creadores de cuatro países: México, Ecuador, Perú y Argentina, y que se inauguró el pasado 26 de octubre en la galería Más Arte de la capital.

Este es el quinto encuentro de su tipo, que reúne piezas de artistas internacionales con creadores locales, como lo explica Moyano. “La idea surge como una manera de continuar la internacionalización de proyectos artísticos durante la fragmentada de la pandemia, y hallar un espacio para potenciar los diálogos y colaboraciones entre diferentes galerías, espacios y agentes del arte contemporáneo latinoamericano”.

Durante los meses de trabajo virtual, los tres gestores intercambiaron portafolios y propuestas, con el fin de integrar piezas que pudieran dialogar entre sí.

“Queríamos mostrar, desde nuestra perspectiva y nuestra parcialidad, lo que está ocurriendo en la escena del arte contemporáneo”, explica Cotero, y con ese fin, no se eligieron creadores solo de México y Ecuador, sino que se incluyeron a artistas de Perú y de Argentina.

En las piezas elegidas hallaron ejes en común, intereses estéticos y temáticas geopolíticas que se compartían.

“Lo mágico, lo místico, lo mítico, lo fantástico y lo que alude al paisaje”, indica Flores. “En el arte se disuelven ciertos límites y hay una conexión que es mucho más clara en términos estéticos”. La muestra estará abierta hasta el 10 de noviembre.

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LA AUTOGESTIÓN, UN PROBLEMA REGIONAL

Las preocupaciones estéticas y geopolíticas que parecen unir a los creadores latinoamericanos, se pueden visibilizar en las obras de los artistas invitados. Entre ellos están los mexicanos Gabriela Lovato, Liz Mevill, Mariana Paniagua, Daniela Terroba, Sebastián Terrones y Daniel Robles, la argentina Sonia Badura, la peruana Aileen Gavonel y las ecuatorianas Brenda Vega, Pamela Abad, Raffaella Descalzi, María Fernanda García y Fernanda Murray.

A los gestores, en cambio, también los unen las dificultades, principalmente las complejidades de la autogestión que mantienen vivos a los distintos espacios independientes de la región.

“Si bien cada quien trabaja en sus propios proyectos, por la cercanía que existe en el circuito artístico en la Ciudad de México, encontramos que trabajamos de manera similar, a través de la autogestión y través de los afectos”, explica Adriana Flores.

No obstante, la época pospandemia dejó en claro las dificultades para el trabajo desde la autogestión y les obligó a repensar sus procesos. “Nos dimos cuenta de que desde la autogestión era imposible sostenernos. Entonces tuvimos que aprender a comunicarnos y a unirnos y a cuidar nuestros recursos”, agrega Cotero.

A este replanteamiento teórico también se le unió el afectivo, es decir, entender cómo continuar tejiendo redes no solo desde lo local, sino en otras ciudades de la región que cuentan con un movimiento artístico importante.

“Era necesario ver más allá, buscar aliados, con el fin de continuar impulsado la escena”.

Con él concuerda Moyano. “Entre los espacios vimos la necesidad de trabajar juntos para continuar internacionalizando nuestras propuestas y a nuestros artistas porque no podíamos solo sentarnos a esperar”, señala.

Los primeros encuentros se llevaron a cabo poco después de la pandemia con galerías en Guatemala y España, mientras que este año se hizo un intercambio y residencia con la Galería NAC de Chile. En ese proceso, el artista guayaquileño Leo Moyano expuso sus cuadros allá, mientras que las obras de Pilar Elgueta se mostraron en Quito.

Para el próximo año, la curaduría se hará con espacios en Argentina.

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UN ENCUENTRO PARA PROYECTOS INDEPENDIENTES

Dentro de la agenda de la exposición se han organizado una serie de encuentros, talleres charlas abiertas al público. Cotero y Flores ofrecieron en la FLACSO el taller Imaginar juntes: el quehacer de la gestión afectiva, y participaron en un conversatorio junto a la artista mexicana Liz Mevill.

El miércoles 1 de noviembre habrá un encuentro de proyectos independientes en el que participarán las publicaciones nacionales Recodo Press, Siniestra y Furia Fanzine Fest, así como la revista mexicana Chiquilla te quiero y en el que los productores de las mismas hablan sobre sus experiencias.

Este se llevará a cabo a las 18:00 en Más Arte (12 de Octubre y Abraham Lincoln). El ingreso es libre.

PRÓXIMA PARADA: MÉXICO

En 2024, Vestigios metabólicos se trasladará a Ciudad de México, donde habrá una apertura similar a la de Quito, y un ciclo de encuentros, talleres y charlas.

“No sabemos aún qué variantes tendrá, que seguro hay, pero la idea es que esta muestra nos permita continuar con este vínculo para fortalecer esta red colaborativa de gestores de lo sensible, de arte y cultural que estamos construyendo”, comenta Cotero.

Y si bien no se ha definido la fecha para esta muestra, se adelantó que se hará en el espacio autogestivo Tlaxcala 3 que dirige el gestor mexicano. 

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