Letizia y Felipe, un agrio aniversario
La pareja real española en plena crisis cumple 20 años de matrimonio
El 22 de mayo del 2004, el príncipe Felipe y Letizia Ortiz contrajeron nupcias. Ha corrido mucha agua bajo el puente. El próximo miércoles, ellos cumplirán 20 años de casados. Los ahora reyes de España han atravesado muchos obstáculos. Juan Carlos, padre de Felipe, trató de impedir la boda, convencido de que la actual soberana no era la idónea. Desde entonces los ataques al matrimonio Borbón Ortiz han sido constantes.
Gran parte de la alta sociedad no admitía que la próxima soberana de España fuera la nieta de un taxista, además divorciada. El arzobispado de Madrid, ante las reiteradas demandas de información de sus devotos, tuvo que publicar un informe en el que concluía que no existía ningún impedimento para que el royal contrajera matrimonio con una divorciada civil.
No la dejaron en paz. La delgadez de Letizia también fue motivo de cuestionamiento. En 2005 el entonces jefe de prensa de la Casa Real, Juan González-Cebrián Tello, llegó a enviar una carta al director de un medio nacional negando que padeciera anorexia.
Además siempre se ha dicho que es una mujer ambiciosa porque provienen de diferentes clases sociales. Nunca se integró a la familia Borbón ni a sus amistades. Las infantas Cristina y Elena nunca recibieron bien a las novias de su hermano y Letizia no fue una excepción y la animadversión hacia su cuñada fue más grande cuando esta comenzó a robarles protagonismo en la vida oficial y familiar.
Mabel Galaz en 'La reina real' asegura que la soberana supo de la existencia de Corinna Larsen, amante de Juan Carlos. "Ella estaba al corriente de su doble vida y le preocupaba cómo podía afectarle a su esposo y a su futuro en la Corona. Tampoco entendía la actitud de la reina Sofía que miraba hacia otro lado y seguía ejerciendo su papel en público como si nada sucediera".
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La relación entre nuera y suegra se hizo más evidente, sobre todo a partir del incidente de Semana Santa de 2018, en la catedral de Palma de Mallorca cuando Sofía quiso hacerse una fotografía junto a sus nietas, para lo cual las abrazó y llamó al fotógrafo de la institución, Francisco Gómez. Letizia lo impidió. No satisfecha con eso, se acercó a Leonor para quitar de su hombro la mano de su abuela, quien por su parte intentó zafarse de Letizia para que la fotografía pudiera hacerse.
Hay otra circunstancia es no darle su lugar a la emérita. Para Letizia, el papel de abuela le correspondía a Paloma Rocasolano y que la reina Sofía era eso, la reina.
En medio de crecientes rumores, la relación de la pareja sigue siendo objeto de intensa atención mediática. Según expertos en la Casa Real, el matrimonio ha estado atravesando una crisis profunda desde hace años, con vidas separadas y una conexión prácticamente inexistente.
Las últimas noticias indican que habían acordado firmar el divorcio una vez que sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, cumplieran 18 años. Sin embargo, informes afirman que esta separación legal no se llevará a cabo en abril de 2025, cuando Sofía alcance la mayoría de edad.
Según la periodista Laura Rodríguez, ella ya no reside en el pabellón del príncipe, donde vivía junto a su esposo y sus hijas, sino que se ha mudado a un edificio colindante al palacio de la Zarzuela.
No es la primera vez que se dice aquello. Antes han señalado que Felipe y Letizia ya no estaban juntos, aunque mantenían las apariencias por el bien de la institución.
Jaime del Burgo, exesposo de Telma Ortiz, hermana de Letizia, desató un escándalo en 2023 cuando insinuó una infidelidad por parte de la monarca con él.
La reciente hospitalización de Sofía en la clínica Ruber debido a una infección del tracto urinario reveló aún más sobre la separación. Después de asistir a la boda de José Luis Martínez Almeida y Teresa Urquijo y a una misa en Madrid, Letizia acompañó a Felipe a visitar a la emérita sin cambiarse de ropa tras su viaje desde Canarias. Este detalle sugirió que no tuvieron tiempo de pasar juntos por su residencia, aumentando las sospechas de que no viven bajo el mismo techo. Las visitas diarias de Felipe VI a su madre, acompañado solo en una ocasión por Letizia, reforzaron esta teoría.
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