“En la pintura encuentro todas las virtudes del ser humano”, ha señalado el artista y filósofo capitalino Juan Carlos Jurado Reyna.

El artista estrenó esta semana la muestra ‘Tiniebla Sagrada: Claroscuro y Simbolismo’, una exposición de cuarenta obras que capturan la esencia del barroco.

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Las obras están elaboradas a base de óleo y acrílico y una extensa maestría técnica, lo que logra generar tonalidades místicas y negar la luz, una característica del barroco.

Las sombras destacan en las piezas, creando una atmósfera de penumbra que esconde las figuras y los objetos, revelando detalles selectivos y ocultando otros. Estas proponen, a su vez, un juego con el público.

“En el corazón de la obra de Jurado se encuentra una obsesión por la figura humana. La representación de la mujer se erige como paradigma de belleza, pero no de una convencional, sino de una belleza que explora los matices de lo oscuro y lo sublime”, señala Paúl López.

‘Tiniebla Sagrada: Claroscuro y Simbolismo’ estará abierta al público hasta el 5 de marzo en el Taller José Bastidas, ubicado en Leonidas Plaza y Francisco Robles, en Quito.

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