Para Francis Baque, de 25 años, estudiante del cuarto semestre de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Guayaquil, cuidar a su hijo de dos años, estudiar y trabajar eran tareas complicadas, principalmente porque no podía coordinar los horarios y conseguir a alguien que la ayude con su niño.

Desde hace dos meses, ella va a la universidad en compañía de su hijo, tras ser una de las beneficiadas con el servicio de guardería que ofrece este centro de estudio superior para evitar que las jóvenes que son madres deserten de sus estudios.

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En la Universidad de Guayaquil, que tiene más de 70.000 alumnos, existe una tasa de deserción del 28,35 % en los últimos tres años. Una de las causas es el cuidado de los hijos, a la que se une la parte económica, debido a la falta de empleo, según se informó.

Es la segunda universidad pública del Puerto Principal que cuenta con una guardería. La Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) inauguró en junio de 2022 un centro que posibilita que padres y madres de la comunidad politécnica puedan llevar a sus hijos, de entre 1 y 3 años, para que sean supervisados y atendidos por profesionales capacitados en cuidado infantil y estimulación temprana, mientras ellos realizan sus actividades laborales y académicas.

El Centro de Desarrollo Infantil de la Universidad de Guayaquil funciona, de manera gratuita, de lunes a viernes en el edificio de la Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación, en un área de 361 metros cuadrados.

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Cuenta con áreas de estimulación temprana, terapia de lenguaje, lactancia, didáctica, pintura y manualidades, cunas y camas, consultorio médico, pañalera, biblioteca, lavandería, juegos infantiles y un lactario que funcionará en los próximos días.

A la guardería llegan 30 pequeños que se entretienen con rompecabezas y pelotas en amplias salas acondicionadas; corren y saltan sobre las colchonetas de colores; arman figuras con legos; toman biberón, lonchan y hasta hacen una siesta en las cunas instaladas en alguna de las áreas.

Todas las actividades son acompañadas y supervisadas por profesionales, quienes tienen como consigna garantizar un cuidado y atención especializados a los niños desde uno hasta tres años y once meses de nacidos, mientras sus padres cumplen su horario de clases en las diferentes unidades académicas.

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Al trabajo se unen los estudiantes de Educación de Párvulos, Psicología y Medicina que realizan sus prácticas académicas y labores de vinculación con la comunidad.

“El apoyo ha sido muy bueno porque como mamá y estudiante me quedo con la tranquilidad de que mi hijo está muy bien cuidado y lo tienen supervisado y controlado. He visto muchas noticias en las que dicen que maltratan a los niños en las guarderías y sé que aquí nunca pasaría eso”, afirma Francis mientras se despide de su hijo antes de dirigirse a sus clases.

Junto a ella está Jennifer Chóez, estudiante de la Facultad de Filosofía, quien califica como ‘una gran ventaja’ que la universidad cuente con este espacio. “Muchas veces como mamá es difícil seguir los estudios porque no tenemos quien cuide a nuestros bebés. Entonces estamos pensando mucho en ellos, no nos concentramos en las clases y, al final, tenemos muchos problemas que nos obligan a retirarnos”, cuenta la futura maestra, quien estuvo a punto de abandonar la carrera por este motivo.

Un caso similar es el de Claudia Vera, alumna de Ingeniería Civil. “Antes tenía que dejarlo encargado con algún familiar o vecina. Ahora lo tengo cerca, estudio con tranquilidad y puedo asegurarle el bienestar a mi niño”, subraya complacida.

Maritza Vallejo, directora de la guardería, recalca que la iniciativa nació del decano de Vinculación con la Sociedad y Bienestar Estudiantil, con el apoyo de la Prefectura del Guayas, que vieron la necesidad de tener un espacio para mejorar la asistencia de los estudiantes a clases, sobre todo de aquellos que son padres y no tienen con quién dejar a sus hijos pequeños.

Señala que al momento la guardería acoge a 30 niños en la jornada matutina de 07:00 a 13:00; pero en el siguiente semestre se espera implementarla en la tarde, con los que sumarán 60 los beneficiados.

Cuenta con 14 profesionales en las diferentes áreas, que irán aumentando de acuerdo a como crezca el número de niños.