Una vez más, las quejas por la falta de mantenimiento y los robos de estructuras persisten en el Puente de la Unidad Nacional que, como publicó hace cuatro meses este Diario, ya había reportado daños similares, aunque menores, en el tramo que conecta a Durán con La Puntilla (Samborondón); donde hoy se han llevado ya más de una decena de barandas y las tapas que cubren el cableado eléctrico.

En un recorrido que hizo este Diario ayer pudo constatar que las dos o tres barandas que hace cuatro meses se habían robado siguen sin ser reemplazadas y con apenas una cinta amarilla que advierte del peligro; y que en el puente ahora sobran los espacios sin protección en las que una persona podría hasta escabullirse y caer en el río, de sufrir un accidente.

“Desde que EXPRESO alertó de este escenario, nada ha cambiado. Nunca repusieron las piezas extraídas, nunca las arreglaron y el peligro de caer al Guayas sigue latente”, se queja Lucía Garnica, una trabajadora que a diario se moviliza a pie por la estructura para llegar desde Durán hasta Guayaquil.

“Lo único nuevo aquí es que cada vez hay menos seguridad. Se siguen robando las barandas en otra zona y ahora ni si quiera están poniendo las cintas de ‘precaución’. Simplemente está abandonado todo. ¿Y si un niño pasa por aquí? Seguro termina en una desgracia. En las noches resulta imposible caminar, es como ir en un camino a ciegas. En una cuerda floja”, denunció la ciudadana.

En julio pasado, mediante un correo electrónico, el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) respondió a EXPRESO indicando que se estaban gestionando los recursos para lograr reponer los pasamanos sustraídos. La entidad preveía hacerlo en los próximos días, pero nunca precisó una fecha. Hoy, sigue sin tener nuevos pasamanos.

Frente a ello, EXPRESO buscó nuevamente una respuesta por parte de esta cartera de Estado, que indicó que ya se está trabajando en el tema. “Se calcula que hay un faltante de 450 metros de tubería. También hay afectación en las tapas de hormigón a lo largo del puente y se evidenció que han sido sustraídas ocho tapas y hay daños en otras 15 más”, informó en un comunicado. Además indicó que la Dirección provincial inició los trámites para la reposición de las tuberías (de metal) y poder contar con las barandas, pero una vez más, sin precisar fecha.

Esta situación también incomoda a la comunidad de ciclistas que a diario deben esquivar los huecos y tratan de transitar lo más lejos posible de los pasamanos. “Algunos ya han sacado esta zona de la ruta porque es peligrosa. Hay demasiadas alcantarillas sin tapas que son casi imposible esquivarlas. Caemos en una, brincamos y podemos caer al río”, comenta Cristhian Paz, morador de La Puntilla que casi a diario transita por el sector. “Cada vez que salgo a hacer deporte vengo por acá y hay mucha tensión al cruzar este puente. No tiene barandas y hay una sensación horrible como que si te fueras a caer. Además, hay zonas apagadas o la luz es tenue. La ruta ya no es amigable”, piensa.

Durante el recorrido que hizo este Diario se evidenció que ahora hay hasta basura arrumada en uno que otro tramo. “Parece que llevan años sin que por aquí pase un recolector o una escoba. Hay un descuido total. Este se supone que es el Puente de la Unidad Nacional, pero como van las cosas parece que el nombre que más le calza es el puente de la vergüenza nacional”, dijo enérgico Raúl Luna, morador de Durán, que ante el hecho de sentirse desprotegido camina por la calzada, a escasos metros de los vehículos y buses provinciales.