El alto índice de violencia criminal y delincuencial que soporta la ciudad puso en la mira de la Policía Nacional otros espacios públicos para brindar mayor resguardo.

El pasado sábado 15 de abril, el Distrito Portete incrementó su personal para precautelar la seguridad en iglesias católicas, supermercados y plazoletas.

Según el coronel César Peñafiel Rodríguez, jefe del Distrito Portete, son un total de 45 uniformados que realizan esa tarea. Uno de los operativos se ejecutó en el sector de la 38 y la A, suburbio de la ciudad. Los policías se colocaron incluso en los ingresos de las iglesias.

“Hemos incrementado la presencia policial en esos sectores para que se sientan más seguros y siempre cuenten con su Policía Nacional del Distrito Portete”, dijo el oficial al explicar que se trata de estrategias para combatir el robo a personas y a vehículos, en diferentes sectores como los templos, últimamente blanco de ataques, robos o intentos de robo como el registrado el pasado 2 de abril en la iglesia Santa Teresita, ubicada en la urbanización Entre Ríos, en el cantón Samborondón.

Ese día, un individuo ingresó por la puerta posterior del parqueadero, pero nadie salió herido en el incidente, informaron representantes de la iglesia a través de un comunicado.

Ocho días después, en el cantón La Libertad, provincia de Santa Elena, un policía fue asesinado al estilo sicariato dentro de un templo. En el ataque también murió una mujer y su hija, menor de edad, resultó herida, ambas como víctimas colaterales del hecho.