Desde muy temprano, Inés Castro, educadora del Servicio de Atención Familiar para la Primera Infancia (Safpi), llega al sector de Juan Montalvo al noreste de la ciudad para visitar a niños como parte de su jornada diaria.

El trabajo es coordinado, junto a los padres, con quienes los pequeños realizan actividades y dinámicas de aprendizaje.

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A través de este servicio educativo alternativo y flexible, la docente genera un clima de confianza, realizando sus primeros enlaces y vínculos afectivos entre la familia y los niños, con quienes trabaja en su identidad, autoestima, lenguaje, desarrollo de capacidades intelectuales, inteligencia emocional y motricidad.

“El trabajo con la familia es fundamental porque poco a poco se dan cuenta de que están creciendo junto a sus hijos estas etapas de aprendizajes”, comentó Castro.

Para Evelyn Ávila, madre de Trey y Bianca, de 1 y 3 años, recibir las indicaciones para ayudar a estimular a su hijo es muy positivo. “Me gusta mucho la atención personalizada que recibimos de la maestra. Mis niños han avanzado mucho en su autonomía y su parte motriz, estamos aprendiendo para ayudarlos en su aprendizaje”, indicó.

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En la Zona 8, comprendida por los cantones Guayaquil, Durán y Samborondón, 3.960 niños estimulan sus habilidades a través de esta modalidad, junto a la guía de 157 docentes.

Con las actividades lúdicas se reconocen los aspectos e intereses de cada niño. El desarrollo de dinámicas y juegos de presentación ayuda mucho.