Sobre un cerro y en medio de la nada, lo que iba a ser la solución para dotar de agua potable al cantón Durán las 24 horas y 7 días de la semana, hoy no es más que un ‘elefante blanco’ lleno de moho, maleza y colmenas de abejas.

En esas condiciones se encuentran los reservorios de la obra del proyecto de mejoramiento y optimización de la conducción del agua potable en Durán, en el sector de Peñón del Río. Una megaobra que en 2014 fue ofrecida como una solución definitiva al grave problema de desabastecimiento del servicio por tubería, con un préstamo de 40 millones de dólares, otorgado por el Banco del Estado.

La ejecución de la infraestructura empezó a mediados de 2015 y tenía previsto finalizar en octubre de 2017, para con ello “cubrir el 100 % del servicio las 24 horas del día (a la población que cuente con las redes) y dotar a sectores que actualmente no poseen el servicio y que se irán incorporando al sistema en mediano y largo plazo. Este servicio mejorará la condición de vida de la población”, se especifica en un comunicado de ese entonces de la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado de Durán.

Han pasado cinco años desde que culminó la construcción, pero la mayoría de sectores siguen abasteciéndose de agua por tanqueros, a 1 dólar cada tanque. “Somos 65.000 familias que compramos como mínimo un tanque de agua diario”, indicó Alfredo Carrasco, del Comité de Usuarios de Durán, quien cuestiona que a pesar de que en algunos sectores reciben agua por determinados días y horas, se les cobre haciendo cálculos y estimaciones, lo que ha generado hasta multas. Ante eso, adelantó que presentarán en la Defensoría del Pueblo una queja sobre el abuso de ese cobro, que violenta el artículo 40 de la Ley de Defensa al Consumidor, que determina que no se puede cobrar ningún servicio básico sin la correspondiente lectura, en caso de existir algún medidor.

Pero no es la única queja. Ante las denuncias ciudadanas, el asambleísta Ricardo Vanegas realizó ayer una inspección de las dos obras ejecutadas con ese préstamo, en el sector del Chobo (en el cantón Milagro) y en Peñón del Río (en Durán). Esto, dentro de un proceso de investigación y fiscalización de los valores que fueron suscritos por el Municipio en el año 2014 por el antes llamado Banco de Desarrollo del Estado (BEDE).

“Ya hay informes técnicos que demuestran que el objeto del contrato no se cumplió, razón por la que el BEDE ha pedido la devolución de esos valores que se entregaron al Municipio de Durán. En razón de aquello, el año pasado se presentó una acción penal por peculado en contra de la administración que adquirió estos pozos”, declaró Vanegas.

Alfonso Córdoba, quien señaló que fue gerente de Agua Potable, aseguró que se entregaron los recursos y se terminó la obra, pero Durán no tiene agua, “y vemos una obra majestuosa que no tiene ninguna funcionalidad. Entonces los ciudadanos nos preguntamos: ¿hasta cuándo?”.

Una obra con estudios incompletos

Mediante un comunicado, el Municipio de Durán menciona que el informe del examen especial que realizó la Contraloría General del Estado en julio de 2020, sobre la mencionada obra firmada en la administración de la exalcaldesa Alexandra Arce Plúas, “se habría ejecutado sin planificación, con estudios incompletos, las prórrogas concedidas, desfases por rubro ejecutado sin cumplir especificaciones técnicas y que además revela nombres y apellidos de los causantes del perjuicio”.