Grafitis, suciedad y basura. Eso se evidencia en al menos tres pasos a desnivel en el norte de Guayaquil.

En los pilares del viaducto ubicado sobre la avenida Carlos Julio Arosemena, en su intersección con Las Monjas, se observan varios desechos sólidos, así como el desgaste en la pintura de la estructura.

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Las luminarias colocadas en el sitio se encuentran sin funcionar desde hace varios meses, denunciaron ciudadanos que transitan a diario por esta zona.

Otro paso a desnivel donde se observa una gran cantidad de basura es el que está sobre la avenida Francisco de Orellana y su intersección con la Benjamín Carrión, en la ciudadela Alborada.

Desechos de plástico, botellas de vidrio, empaques de productos alimenticios y ropa vieja están regados en este espacio, del que también se desprenden malos olores.

A pocas cuadras de allí, en la avenida Francisco de Orellana y Agustín Freire, entre las ciudadelas Ietel y Garzota, en otro viaducto también se ven a diario restos de cajas con basura y otros desperdicios.

Transeúntes piden a las autoridades municipales y al consorcio Urvaseo que designe personal para realizar la limpieza de estas áreas de movilidad.

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Asimismo, solicitan mayor presencia de agentes policiales, pues en las noches acuden sujetos con actitud sospechosa y otros que se instalan para consumir sustancias ilícitas.

También que sean reparadas las luminarias que se encuentran en mal estado.

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