Desde este 19 de enero rige la ordenanza que regula la ocupación de la vía pública mediante la instalación de elementos de seguridad (cerramientos o rejas), tras su publicación en el Registro Oficial (RO), en la Edición Especial No. 1301.

Ahora todos los sectores de la ciudad que cuenten con estos implementos, previo a la publicación de la ordenanza, tendrán un plazo máximo de 6 meses para que sean regularizadas de acuerdo la normativa vigente, es decir, hasta mediados de julio.

Entre los requisitos a cumplir y que serán evaluados por la Dirección de Planificación Urbana, Proyectos y Ordenamiento Territorial (Dupot) está que las rejas tengan la accesibilidad necesaria para el ingreso de personal de entidades públicas y privadas para brindar atención ante emergencias o servicios de 24 horas.

También deberá mantenerse con acceso peatonal en un horario de 06:00 a 20:00 de lunes a domingo; que sean metálicos, que sus columnas no sean de hormigón y deberán estar pintadas con pintura anticorrosiva de color blanco, negro o verde. Estas son algunas de las especificaciones principales a cumplir.

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Además de las normas descritas previamente, quienes busquen instalar por primera vez las rejas deberán cumplir con esas especificaciones y contar con el apoyo de al menos el 70 % de los moradores del punto para proseguir con la instalación.

El Cabildo indica que una vez vencido el plazo, aquellas rejas que no hayan sido regularizadas deberán ser retiradas por la ciudadanía, de lo contrario la administración municipal llevará a cabo este proceso, donde además de emitir las multas respectivas a los colectivos, también cobrarán por el retiro de estos implementos.

Ante esta situación, la ciudadanía objeta que hay ciertos requisitos, como el retiro de púas o cuchillas. “Incluso con rejas, hay gente que las salta y sería lo mismo que estar sin ellas. Al menos cuchillas en la parte superior se deberían mantener”, comenta Wilson Vásquez, residente de Sauces 1.

Mientras que Carmen Villamar, de Samanes, considera que varias medidas deberían flexibilizarse para las ya instaladas, pues piden que se realicen gastos extras, que no salen del Cabildo, sino de los ciudadanos para garantizar su seguridad.

“Hay muchas cosas que toca cambiar y agregar, ya pusimos dinero para estar seguros y ahora nos toca poner más. Y si no lo seguimos, igual nos atacan al bolsillo”, argumenta.

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