
La Bahía: avanzan reparaciones en quioscos y se refuerza la vigilancia policial
El Municipio ejecuta la reconstrucción de seis módulos afectados por explosión
El Municipio de Guayaquil acelera los trabajos para la recuperación de los seis quioscos comerciales que resultaron afectados por la explosión registrada la noche del pasado martes en el corazón de La Bahía. Las labores se centran en devolver la operatividad a los comerciantes lo antes posible.
Equipos técnicos ya han instalado nuevas planchas de zinc para sustituir las cubiertas dañadas y ejecutan tareas de soldadura en cada una de las estructuras metálicas impactadas por la detonación. El objetivo primordial es que los vendedores puedan retomar sus actividades económicas en el menor tiempo posible, devolviendo la normalidad a una de las zonas comerciales más concurridas de la ciudad.
Se refuerza la seguridad
De manera paralela, la respuesta institucional se ha enfocado en el flanco de la seguridad. A través de la empresa pública Segura EP, se han intensificado los operativos de control y vigilancia para proteger a los más de 4.200 trabajadores que operan en este punto estratégico. Un contingente de aproximadamente 60 uniformados, que incluye personal del grupo táctico y de Control Municipal, patrulla el área tanto a pie como en vehículos motorizados.
Como parte de las medidas a largo plazo para blindar el sector, las autoridades recopilan información técnica que servirá como base para implementar una nueva Estación de Acción Segura (EAS) en La Bahía. Este modelo, similar al inaugurado en Urdesa, busca proporcionar vigilancia permanente a través de monitoreo y una respuesta policial más ágil y cercana.
De forma paralela, y a través de la empresa pública @segura_ep, se han intensificado las acciones de control y vigilancia para salvaguardar a los más de 4.200 trabajadores que operan en esta zona estratégica del centro de la ciudad.@aquilesalvarez pic.twitter.com/QF2ayVPEGC
— aquilismo (@aquilismo) June 8, 2025
La supervisión de las operaciones de seguridad se ha elevado al más alto nivel. El comandante general de la Policía Nacional, Pablo Dávila, inspeccionó personalmente los dispositivos desplegados, asegurando una presencia estratégica y la ejecución de intervenciones focalizadas para combatir al crimen organizado.