Renato Ibarra cree en los nuevos inicios y por eso está seguro que su vinculación con el Atlas le permitirá demostrar que aún tiene mucho que dar en la liga mexicana, luego de la forma en la que salió del América.

El delantero ecuatoriano, quien fue acusado de agredir a su esposa -por lo que incluso estuvo detenido- fue confirmado como refuerzo de los zorros, como se conoce al conjunto azteca.

“No pasó nada, estoy tranquilo en lo personal. Atlas me da la oportunidad para mejorar como persona y futbolista”, sentenció el tricolor, quien tuvo palabras de agradecimiento con las personas que creyeron en él, pese a lo sucedido.

“Agradecido con América, que me abrió las puertas y me hizo sentir bien en México. En redes sociales sentí apoyo de la afición y agradecido por todo eso”, acotó.

“Con 29 años, el extremo es un jugador probado en la Liga MX al más alto nivel. Se distingue por su explosividad, potencia y velocidad en el uno contra uno, acompañado de su capacidad para centrar y definir dentro del área. Con Atlas pondrá sus habilidades a las órdenes del proyecto deportivo, encabezado por Rafael Puente y su cuerpo técnico, brindando desequilibrio y profundidad”, señaló el comunicado oficial del club.

De esta manera, el fútbol le da la revancha a Renato Ibarra. Ahora falta ver si él es capaz de aprovechar la oportunidad. 

El ecuatoriano fue denunciado penalmente por violencia doméstica por su entonces pareja, Lucely Chalá, quien posteriormente retiró los cargos.

Su última aparición fue en el duelo por el título en el que América perdió ante Monterrey en diciembre pasado.