En la temporada 2019 Liga Deportiva Universitaria de Quito ratificó que está en ascenso. El título en la Copa Ecuador, el subtítulo en la LigaPro y los cuartos de final de la Copa Libertadores fueron los resultados de un proyecto que está siendo liderado por el uruguayo Pablo Repetto desde mediados de 2017.

Sin embargo, la vara estará mucho más alta en 2020. Según el directivo Esteban Paz, todas las armas apuntarán al escenario internacional. Quieren volver a ser campeones del continente. Por ello decidieron seguir con el charrúa y renovaron su contrato por una temporada más.

Pero la mano viene complicada desde el inicio. El cuadro capitalino cayó en el grupo D con Sao Paulo de Brasil, River Plate de Argentina y Binacional de Perú.

El calendario le jugó en contra porque cerrará esta fase como visitante en Argentina. Es decir, tiene la obligación de llegar a la última jornada con la clasificación en el bolsillo para evitar alguna ingrata sorpresa.

En caso de que no pueda avanzar le quedará el premio consuelo: la Copa Sudamericana. Accederá si termina en la tercera casilla de la fase de grupos de la Libertadores.

Además, en la agenda está la posibilidad de participar en la Supercopa Sudamericana. Este torneo es un sueño del presidente de Conmebol, Alejandro Domínguez. Busca enfrentar a todos los campeones de la Copa Libertadores. En su plan está usar este certamen para elegir a los representantes de Sudamérica para el nuevo formato del Mundial de Clubes. Pero FIFA todavía no determina cuántos equipos estarán en ese Mundial, ni ha dado el aval para una Supercopa.

Casa adentro, Liga de Quito tiene la disputa de la Supercopa de Ecuador contra Delfín el 1 de febrero. A partir de 2020 los equipos podrán sumar hasta tres coronas locales, ya que también tendrán la Copa Ecuador y la LigaPro.

Los juegos coperos ante River Plate y Sao Paulo tienen un grado mayor de dificultad por una sola razón: entre esos dos encuentros, con diferencia de siete días, estará el partido contra Barcelona en el Rodrigo Paz Delgado. Si bien son las primeras fechas de la LigaPro y los puntos no serían tan importantes para la suma total, está en juego el invicto de 22 años que tiene el albo sobre el torero en esa cancha.

Y por ello, contar con una amplia plantilla se vuelve vital. Para contratar a nuevos futbolistas fue necesario soltar a otros como Hernán Pellerano, Julio Angulo y Jacob Murillo. Ellos no renovaron el contrato.

En cambio, llegó el lateral derecho Pedro Pablo Perlaza. La intención es que se convierta en una opción para que Antonio Valencia juegue en el callejón central.

La noche del lunes se sumó el sorpresivo fichaje del defensa Moisés Corozo, quien había sido anunciado como refuerzo del Barcelona 2020.

Uno de los principales objetivos es la renovación de Jefferson Orejuela, cuyos derechos deportivos pertenecen al Fluminense. Pero el factor económico ha sido el problema más grande. El cuadro brasileño quiere vender, pero Liga no tiene el dinero para una transacción de esa magnitud. Siguen en el tira y afloja esperando un acuerdo.