Lionel Messi volvió a las canchas este miércoles 11 de enero de 2023 después de ganar la Copa del Mundo con Argentina, y todo el morbo que se generó porque debía presentarse en Francia, país al que derrotó en la final de Qatar 2022, quedó marginado por dos detalles puntuales.

El primero es que el argentino, al igual que el resto de la plantilla del Paris Saint Germain (PSG), saltó al gramado del Parque de los Príncipes para realizar el calentamiento con una camiseta dedicada a Pelé, quien falleció el pasado 29 de diciembre, a los 82 años.

Fue el homenaje preparado por la institución para el brasileño. Pero durante ese calentamiento previo al juego contra el Angers, los hinchas aprovecharon para expresar sus primeras muestras de cariño a Messi gritando su apellido.

El segundo punto es que la directiva del PSG decidió no organizar una bienvenida oficial para su campeón del mundo, tal como sucedió en otros clubes.

Lo único cercano a una ceremonia fue su anuncio en el once inicial. Allí los aficionados gritaron su apellido con fuerza. Lo llenaron de aplausos, como dejando claro que no hay resentimiento.

Y nada más. El resto fue un día normal en la cancha, disfrutando de sus gambetas, pases e inventos. Incluso hubo espacio para festejar un gol suyo. Fue el segundo del equipo, a los 72 minutos.

Lionel Messi armó una doble pared y remató de derecha. No lo festejó de inmediato porque tuvo que esperar hasta el visto bueno del VAR. Al final, su equipo ganó por 2-0 al Angers y se consolidó en el liderato de la Ligue 1.