En su primera competencia oficial de la temporada, Elizabeth Bravo consiguió el objetivo de sumar los puntos para sellar su boleto a Tokio 2020.

La triatlonista ecuatoriana tenía pendiente dos carreras puntuables en este primer semestre y además la posibilidad de mejorar sus registros del año anterior.

En la parada de la Copa del Mundo en Mooloolaba (Australia), Eli se ubicó en el quinto lugar y ganó 350 unidades con lo que consolidó su ubicación en la zona de clasificación del ranking olímpico, en el que previo a la prueba se encontraba en la posición 69.

Bravo demostró que está en gran forma tras salir de una exigente pretemporada en la que enfatizó el trabajo en natación y bicicleta, con el objetivo de igualar el desempeño al de su especialidad, el atletismo. Y en Australia plasmó que su nivel es muy alto disputando el podio hasta el final.

La lucha fue cerrada con la local Ashleigh Gentle y la neozelandesa Andrea Hewitt, lo que se reflejó en que la tricolor llegó a la meta solo cinco segundos después de quien completó el podio.

La prueba fue ganada por la británica Vicky Holland (medallista de bronce en Río 2016), escoltada por su compatriota Georgia Taylor-Brown y con Gentle en el tercer lugar.

Tokio será la tercera experiencia olímpica para Bravo, tras Londres 2012 (lugar 49) y Río 2016 (47), y buscará aprovechar las enseñanzas que le dejaron las citas anteriores para ir en busca de ubicarse entre las ocho mejores y así obtener un diploma olímpico.

“Me siento mucho mejor en la parte emocional y física. Cuento con un equipo de apoyo que cuida hasta el mínimo detalle, estoy cumpliendo con mi mejor ciclo olímpico y eso me motiva”, comentó la triatlonista cuando terminaba la pretemporada y ya tenía claro que llegaría a Tokio.