El primer rival de la Tricolor en esta doble fecha de eliminatorias es Bolivia, en La Paz, un lugar que se ha vuelto favorable para el combinado nacional. El 12 de enero de 1997 fue la última vez que Ecuador perdió de visitante ante la selección del altiplano. Después solo ha tenido victorias e empates.

Pero hay un partido inolvidable que se jugó el 6 de octubre del 2001 y que terminó en goleada para la Tri. Aquel resultado la colocaba con un pie en su primer Mundial y un mes después selló la clasificación a Japón y Corea 2002.

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Han pasado 22 años de este suceso que está ‘enmarcado’ en el recuerdo de los jugadores que protagonizaron aquella famosa goleada en el estadio Hernando Siles. El exarquero José Francisco Cevallos comenta que llegaron a La Paz aquel día con la ilusión de sumar los tres puntos. “La goleada 5-1 fue como la fiesta previa de lo que se iba a venir en Ecuador cuando clasificamos ante Uruguay”, expresa el ahora comentarista deportivo.

Para Cevallos, ese triunfo fue vital porque dejó atrás los malos resultados previos ante Bolivia, debido a que en las eliminatorias para Francia 98 se impusieron los bolivianos. “Teníamos un equipazo. Sabíamos que ganar en La Paz era clave y lo logramos”, afirma Cevallos.

Analiza que la actual selección lo llena de esperanza. “Antes se hablaba mucho de jugar en la altura. Ahora las cosas han cambiado, la mayoría de chicos lo hacen en el llano, pero cuando juegan en Quito no les afecta y eso también se vivirá ahora en La Paz”.

El exmundialista considera que “tenemos una selección fuerte, un equipo que nos hace soñar. Hay juventud y eso es bueno. Sobre todo, hay muchos jugadores entre los cuales escoger”, resalta.

Por su parte Luis Gómez, entrenador de las divisiones menores de Barcelona, tiene los mejores recuerdos cuando se habla de Bolivia. El Chino dice que únicamente estuvo cinco o seis minutos en cancha en un partido que ya estaba resuelto a favor del combinado nacional, pero cuando marcó su gol vivió la celebración más grande que había tenido con la selección.

“En realidad fue el quinto gol, pero lo celebré en grande”, rememora el exseleccionado, que lo compara con la conquista que marcó con Barcelona ante Macará en Ambato y que evitó el descenso a la Serie B en el torneo del año 2000.

Gómez considera que la Tricolor tiene actualmente una gran generación de jugadores y que está seguro de que en La Paz, el jueves, se dará un paso en firme hacia el Mundial de 2026. “Tenemos una gran selección. En Bolivia comienza nuestro ascenso en la tabla”.

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