Reducir o aplazar el pago de los sueldos, utilizar dinero proveniente de competencias internacionales, buscar financiamiento de la empresa privada, los derechos de transmisión y transferir jugadores son las estrategias que los clubes ecuatorianos utilizan para sobrevivir en medio de la crisis provocada por la pandemia del coronavirus.

Antes de la llegada de la enfermedad, Emelec, El Nacional, Independiente y Macará habían aumentado su presupuesto, en relación a 2019. Hoy todo cambió radicalmente, según algunos dirigentes le explicaron a EXPRESO.

El escenario es diferente en cada institución. Para citar ejemplos, Nassib Neme y Carlos Alfaro Moreno, presidentes de Emelec y Barcelona, respectivamente, afirman que encontraron “buena predisposición” en sus planteles y cuerpos técnicos para tratar de sobrellevar la situación, eso sí, con las reglas de juego bien claras.

“La reducción de sueldo acordada es hasta julio. En agosto nos reuniremos para evaluar escenarios potenciales y acordar con cada área del club”, explicó Neme, al tiempo de aclarar que el tema se trató con los seis capitanes del equipo, en función a las escalas contractuales de cada jugador.

No se dan a conocer cifras, pero se deja claro que se llegó a un acuerdo con todos, incluido el personal administrativo.

“La aceptación de reducción de sueldos de quienes hacen la institución (miembros del cuerpo técnico, jugadores y empleados en general), nos permite seguir estables en lo financiero”, dijo Alfaro Moreno.

OTRA OPCIÓN

La estrategia que aplica Liga de Quito tiene una variante, aunque no se descarta cambios, debido a problemas de liquidez provocados por la suspensión de la competencia.

“No hemos hecho reducción, sino un acuerdo de suspensión de una parte del sueldo de los jugadores, que varía de acuerdo a la cantidad que cada uno gana. Esa suspensión es un pasivo que genera el club con el futbolista y que se le irá pagando conforme a los ingresos lleguen. Como no hemos recibido los ingresos de derecho de televisión y también tenemos suspensión de pagos de auspiciantes, la circunstancia puede volverse tan crítica que posiblemente tendremos que comenzar a hablar de reducción de salarios en los próximos meses, pero aún no se define esa estrategia. En junio evaluaremos si amerita”, detalló Paz.

Es importante señalar que la misma institución bancaria que terminó contrato con Barcelona también suspendió su acuerdo de auspicio con Liga de Quito.

Para Miller Salazar, presidente de Macará, las cosas resultaron más complejas.

“El manejo con los futbolistas es muy complicado, tienen posturas radicales y lo que estamos viviendo es una situación que algunos no pueden entender. Se está alcanzando un acuerdo y será mientras dure la pandemia, seguramente hasta fin de año, porque hasta esa fecha jugaríamos sin público. Me informan que los dueños de televisión (los derechos de transmisión) nos pagarán el 50% del mes de abril. Con eso no nos alcanza ni para pagarle al cuerpo técnico. Ese rubro nos representa cerca del 40% del presupuesto”, indicó.

Los equipos que clasificaron a torneos internacionales recibieron una inyección económica de parte de la Conmebol, además de los derechos de transmisión de la LigaPro, correspondientes a los primeros meses de 2020.

Renegociación con los auspiciantes y posibles transferencias de jugadores al extranjero complementarán las medidas emergentes para sobrevivir en esta nueva normalidad.

LA ESPERANZA DEL DEPORTIVO CUENCA

Claudio Peñaherrera, presidente de Deportivo Cuenca, anunció que no se presentará a la reelección en el proceso fijado para el mes de octubre, al tiempo de reconocer que existe la posibilidad de contar con la participación de un grupo extranjero que inyecte recursos a la institución.

Son inversionistas, quienes enviaron una carta solicitando información como: escritura de constitución del club, estudio de mercado, proyecciones, gastos financieros, gasto corriente (nómina, administrativo y operacional) y obligaciones pendientes con proveedores, para evaluar la situación real.