Ya entrena y está dando raquetazos fuertes, como en los viejos tiempos. Tras casi un año de estar alejado de las pistas por lesión, el exnúmero 1 del tenis mundial, Rafael Nadal, sigue descifrando el mapa de su regreso. Ayer lo hizo develando el primer torneo sobre polvo de ladrillo que disputará: el Conde de Godó, torneo que ha ganado en doce ocasiones y que se disputará del 13 al 21 de abril del próximo año.

De esta forma, el ATP 500 de Barcelona confirmó a su primer jugador para la próxima edición. De momento el balear regresará a las pistas en enero en Australia (Brisbane) después de los problemas físicos que le impidieron jugar durante la mayor parte de la temporada pasada.

El tenista mallorquín mantiene un vínculo muy especial con el Godó, un torneo que ha ganado doce veces y cuya pista central lleva su nombre. Además, es miembro del Real Club de Tenis Barcelona desde su etapa como infantil.

La última vez que jugó en Barcelona se remonta al año 2021, cuando se llevó el título, tras ganar al griego Stefanos Tsitsipas en tres sets (6-4, 6-7 y 7-5).

El director deportivo del abierto barcelonés, David Ferrer, se mostró orgulloso de poder contar con la participación del ganador de 22 Grand Slam.

“Rafa es el mejor jugador de la historia de este deporte y el estandarte de nuestro torneo. Poder seguir disfrutándolo en Barcelona es una suerte y es algo que a mí, a nivel personal, me ilusiona mucho y me hace muy feliz”, aseguró en un comunicado publicado por el torneo.

El jugador de Manacor reaparecerá en el torneo de Brisbane que se jugará del 31 de diciembre próximo al 7 de enero del año que viene, previo al Abierto de Australia, que se disputará del 14 al 28 de enero, y que coincidentemente fue la última cita en la que compitió el mallorquín en 2022.

Nadal disputó su último partido el pasado 18 de enero, cuando cayó en segunda ronda del abierto australiano ante el estadounidense Mackenzie McDonald, y desde entonces ha seguido un proceso de recuperación de una lesión de grado 2 en el psoas ilíaco de la pierna izquierda, por la que pasó por el quirófano. El tiempo estimado entonces para su recuperación fue de cinco meses.

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