Ya con cinco jornadas jugadas de la 'Premier League', con tan solo una victoria, es indudable que el Chelsea aún no funciona ni siquiera con la llegada de Mauricio Pochettino ni con la transformación de la plantilla ni con la inversión de 526millones de dólares; de nuevo en evidencia con un empate a nada contra el Bournemouth para quedarse a diez puntos del liderato del Manchester City con 15 disputados.

Ese es el mejor resumen de la diferencia entre las expectativas y el actual Chelsea, que sólo ha ganado hasta ahora en la competición liguera al Luton, pero cuya crisis no es nada nueva, viene de atrás, de una temporada horrorosa cuyo fin es hoy por hoy imperceptible. Hay datos sonrojantes para él: sólo ha ganado dos de sus últimos 17 partidos en la Premier o ha sido derrotado en cinco de sus siete salidas más recientes en ese torneo.

En reemplazo del niño Moi jugó el francés Lesley Ugochukwu junto con el mediocampo ya conocido conformado por el argentino Enzo Fernández y el inglés Conor Gallagher.

Se espera que Caicedo pueda recuperarse para la siguiente fecha.

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