Barcelona, de la mano de sus dirigentes y el cuerpo técnico, han armado una plantilla con muchos jugadores en el medio campo. La mayoría conocidos y de tamaña clase en los clubes por los que han transitado, pero tener varios jugadores en un mismo sector, ¿puede o no ser beneficioso?

Antes de ingresar al debate, vale destacar que Barcelona en la temporada 2020 tenía un 11 estelar de confianza y luego sus variantes no solían ser revulsivos para el club. Ante este contexto, los amarillos se han encargado de suplir esas necesidades y todo este lindo problema está en manos de Fabián Bustos.

“Creo que todo técnico siempre quiere tener opciones si son fichajes que rinden mucho mejor. Bustos tiene la ventaja que ya conoce a López, ahora deberá conocer más a Cortez, que ojalá pueda encarrilarse este año, también a Hoyos que con minutos puede ser un jugador que le ayude mucho en ataque a Barcelona”, dijo el exdelantero amarillo, Juan Madruñero.

Barcelona incluyó a cuatro volantes en ofensiva para esta temporada: Sergio López, un viejo conocido y campeón junto a Bustos que juega de interior, mediapunta o extremo; Michael Hoyos que puede hacer la banda o jugar como un delantero más retrasado; Jonathan Perlaza es un volante de traslado y también juega de extremo. Por último, Gabriel Cortez, un talentoso que puede hacer de mediapunta o un interior más adelantado.

Estas opciones se suman a Damián Díaz, Matías Oyola, Emmanuel Martínez, Bruno Piñatares y Adonis Preciado.

“Barcelona tiene jugadores de buen pie por todo el sector medular, pero sí hay que ver qué sucede por las bandas. Los únicos que normalmente lo hacen de oficio son Adonis (Preciado) y Emmanuel (Martínez). Bueno por derecha sí o sí Byron Castillo”, analizó al exvolante Janio Pinto.

Otros volantes que pueblan este sector, pero con rol defensivo, son Michael Carcelén (procedente de El Nacional), Nixon Molina, Gabriel Marques y Sergio Quintero.