Luis Suárez, Rakitic, Arturo Vidal, Semedo, Arthur, Rafinha, Todibo y Wagué dejaron el Barcelona durante el mercado de fichajes, y supondrá en conjunto una liberación para el club azulgrana de más de 35 millones de euros (41 millones de dólares) en salarios netos anuales, prácticamente 80 en salarios brutos (94 millones de dólares), según diferentes estimaciones.

Quien más cobraba de los ocho era Luis Suárez (le quedaba 1 año de contrato más otro opcional), hasta su adiós el tercer jugador mejor pagado de la plantilla con poco más de 15 millones de euros netos anuales (17,6 millones de dólares). El Barcelona le pagará 8,8  millones de dólares por la rescisión del contrato.

Arturo Vidal (traspasado al Inter de Milán por 1,1 millones de dólares en variables) ingresaba 10 millones y ha renunciado a cobrar el último año de contrato que le quedaba, igual que Rakitic (traspasado al Sevilla por 1,7 millones + 11,7 en variables), quien percibía 10,7 millones.

En el caso de Semedo (traspasado al Wolverhampton por 35 millones + 10 en variables), su salario era de 4,7 millones y tampoco percibirá la retribución económica de los dos años que aún le ligaban con el club azulgrana.

Arthur (traspasado a la Juventus por 84 millones + 11,7 en variables) ingresaba 3,6 millones por temporada y el Barcelona no deberá pagarle nada más a pesar de que le quedaban cuatro años de contrato. Tampoco a Rafinha (traspasado al Mancheser City por 3,5 millones en variables), quien percibía el mismo salario.

Por otro lado, el Barcelona consiguió ceder dos años por 2,3 millones de dólares a Jean-Clair Todibo al Benfica y un año a Moussa Wagué al PAOK de Salónica. En los dos casos los clubes que los acogerán se harán cargo de la totalidad de sus fichas.