Su pan suave, tostado, con un leve sabor ahumado, los vegetales frescos que le dan a cada bocado ese fabuloso crujir, acompañado de un tocino horneado cuyos jugos hacen sinergia con el dulzor del queso cheddar derretido por el calor que emana el humeante trozo de carne molida a la plancha. Estos son los ingredientes que hacen que este plato sea preferido por muchas familias a todo nivel. En el Día Mundial de la Hamburguesa no hay nada mejor que disfrutar la que más le guste, solo o en compañía de sus seres queridos.  

Su fama creció gracias a grandes marcas estadounidenses. Sin embargo, aunque se le atribuía el crédito al país del norte, la creación de este platillo es una muestra más de la cocina alemana. Para mayor precisión, es oriunda de la ciudad de Hamburgo del siglo XIV. En ese tiempo se acostumbraba a sazonar con varias especias ciertos cortes de carne que no era común consumir, para hacerlos más digeribles.

Aunque a diferencia de su versión actual, se preparaba entonces con las partes que sobraban del cerdo. Solía ser un sánduche de domingo con el que se deleitaban en esta urbe alemana porteña, acompañado de vegetales como pepinillos, tomates, remolacha y algunas veces le añadían cebollín. Su nombre era ‘rundstück warm’.

Gracias a que esta ciudad tiene salida al mar, esta preparación pudo viajar miles de kilómetros hasta llegar a Norteamérica y transformarse en lo que es hoy: una delicia sin igual.

• Casi 10 mil calorías

La hamburguesa con más calorías es la Quadruple Bypass Burger, del famoso restaurante Las Vegas Heart Attack Grill (California, Estados Unidos). Incluye, entre otras cosas, cuatro piezas de carne de media libra, ocho lonchas de queso americano, veinte piezas de tocineta, ocho rodajas de tomate y veinte rodajas de cebolla; sin olvidar, por supuesto, la mayonesa, la mostaza y la salsa de tomate. Son, en total, 9.982 calorías de puro sabor.

• Con una hoja de oro

Cuesta $ 2.150 y su creador es el chef Diego Buik. Esta hamburguesa está preparada con carne de vaca Wagyu, langosta Oosterschelde infusionada con ginebra Hermit Dutch Coastal, foie gras, trufas blancas, queso Remeker, jamón ibérico, lechuga francesa, tomates japoneses, caviar... y una hoja de oro de 24 kilates que está colocada en el pan brioche. Es, claro está, todo un récord Guinness.