Luego de mucho pensarlo, trabajar duro, ahorrar y sacar cuentas, por fin ha decidido que es momento de comprar su primer automóvil. Y aunque tener vehículo propio brinda facilidades para la movilización, hay muchos detalles que se deben conocer previamente para que esta herramienta no se convierta en un dolor de cabeza.

Por este motivo, aunque usted tenga una parte del capital y ya se imagine conduciendo el auto de sus sueños mientras escucha su canción favorita, primero debe investigar a fondo varios factores.

ANTES DE COMPRAR

Renato Fierro, director de la carrera de Ingeniería Automotriz en la Universidad Politécnica Salesiana, aconseja que lo ideal es no hacer las cosas al apuro y tomarse una pausa para:

1.  Evaluar necesidades: “No se deje llevar por la recomendación de su amigo o vecino. Usted debe analizar cuál será el uso que le dará a su vehículo”.
2. Realizar una inspección previa con un experto: “Especialmente si compra un auto usado, debe respaldarse en una revisión técnica especializada que cuente con equipos de diagnóstico”.
3. Hacer pruebas de manejo: “Su vehículo lo utilizará para movilizarse a diario, por ello necesita sentirse cómodo en él. Nunca elija un carro sin haber probado por lo menos tres opciones”.

Mientras que David Lalama, gerente general de Conduespol, señala que la compra de un automóvil es el segundo gasto más representativo de una familia, después del de una vivienda. Por ello, es fundamental revisar los siguientes puntos: forma de financiación, tipo de combustible y costos de mantenimiento.

Como elegir el carro ideal

Si ya está totalmente seguro de que va a comprar un carro, el siguiente paso es la selección del mismo. ¿Pero cómo empezar esta búsqueda frente a una gama de miles de modelos existentes en el mercado? ¿Qué aspectos debe considerar para hacer una compra inteligente?

• Tamaño y modelo: Lo primero que debe preguntarse es cuál será su función principal, ya que no es lo mismo un carro para uso personal dentro de la ciudad, que uno de trabajo o de carga pesada.

• Cilindraje y tipo de combustible: Es la relación entre la cantidad de combustible y la potencia del motor. A mayor cilindraje tendrá mayor gasto, pero más fuerza. “Los vehículos vienen diseñados de fábrica para el consumo exacto de un tipo de combustible. La cámara de combustión está perfectamente dimensionada para un cierto octanaje, algo que debe respetarse para garantizar la vida útil del motor”, detalla Fierro.

• Disponibilidad de repuestos: Es importante considerar que conseguir los repuestos para la marca que adquiera no sea una misión imposible. Así mismo, que la marca brinde varias opciones de concesionario.

• Tipo de transmisión: La transmisión es el mecanismo que permite que el auto se desplace debido a la conexión entre ruedas y motor. Puede ser manual o automática. “La tendencia es que lo manual desaparezca. Tenemos arraigado el estilo de conducción en el que nosotros dominamos la potencia manualmente, pero es un tema de costumbre. En cuanto a comodidad, desempeño y consumo, es mucho mejor una transmisión automática”, sostiene el experto.

• Seguridad: Que tenga sistemas de freno ABS, control electrónico de estabilidad y airbags para todos los puestos. “Hay dos tipos de seguridad: activa (preventiva) y pasiva (de reacción). Yo recomiendo a todas las personas que compren sus vehículos con frenos ABS y control de estabilidad”, destaca Lalama.

Modelo acorde a personalidad

Según una investigación de Institute of Transportation Studies, su forma de ser sí influye a la hora de elegir el modelo de su carro. Los autos compactos son seleccionados por personas pragmáticas; los sedanes por quienes buscan estabilidad; los deportivos por hombres aventureros; las camionetas por trabajadores y los SUV por los más hogareños.

Herramientas

Ya sea que tenga un auto nuevo o usado, lo cierto es que nadie está exento de vivir un apuro por una avería mecánica. Ya sea un pinchazo en la llanta o alguna fuga, el conductor debe estar preparado para resolver cualquier accidente menor que se presente en la vía. Por este motivo, pese a que no es posible tener un taller dentro del maletero, Tierra indica cuáles son esas herramientas que sí o sí lo ayudarán a afrontar algún contratiempo: Llanta de emergencia, gato mecánico, cables chicotes, llave tipo 10, playo, linterna, cinta aislante, gancho y cabo de remolque.

Nuevo vs. usado

Uno de los dilemas más comunes a la hora de comprar un vehículo es si adquirir uno nuevo o de segunda mano. Ante esto, el ingeniero Darwin Tierra, con 20 años de experiencia en el sector automotor, explica las ventajas y desventajas de cada uno.

Auto nuevo: Entre sus beneficios está la garantía de encontrarse en buen estado y que cuenta con tecnología avanzada. “Ofrece mayor confort, tiene un sistema de ahorro de combustible y durante un lapso de cinco años de lo único que tendrá que preocuparse es de los mantenimientos periódicos cada 5 o 10 mil kilómetros”.

Mientras que entre sus contras están que es costoso y su valor se deprecia aproximadamente un 10 % al salir de la concesionaria.

Segunda mano: Su mayor beneficio es que es más económico. Sin embargo, los contras son que no se conocen el 100 % de sus condiciones. “Tiene una probabilidad alta de que presente fallas en el motor, ya sea suspensión, sistema de frenos, de aire acondicionado, entre otros, los cuales va a tener que ir reparando de a poco”.

¿Es necesario un seguro?

Además de contar con una licencia de conducir, verificar que esté pagada la matrícula y tener listos todos los documentos necesarios para la transacción, una duda que suelen tener los compradores es respecto a la necesidad de contratar un seguro privado.

La recomendación de David Lalama es que para estar protegido y evitar problemas mayores, en este punto considere tener una amplia cobertura para robo, gastos médicos, servicio de grúa, daños a su vehículo y a terceros.

“Usted no debería sacar el carro y moverlo si no tiene seguro”, sentencia el profesional.