Noviembre es el mes que da paso al bullicioso escenario del Black Friday, donde las ofertas relámpago y los descuentos tentadores compiten por la atención. Y es fácil caer en la trampa de la impulsividad.

Los consumidores, abrumados por la emoción, a menudo se lanzan a comprar sin un plan sólido, resultando en adquisiciones impulsivas que más tarde podrían lamentar.

Este frenesí de compras, aunque emocionante, puede llevarlo a tomar decisiones apresuradas y a la adquisición de productos que no se alinean verdaderamente con las necesidades del consumidor. Así lo indica la comunicadora organizacional Ana Cristina Lecaro. “Es una decisión que probablemente terminará en una compra fallida. Cuando se compra por impulso no se toman las mejores decisiones, es una compra emocional que hará que termine con un producto que probablemente ni usará”.

Mientras que el economista Galo Cabanilla expresa que uno de los errores más comunes radica en la falta de preparación estratégica. Considera que muchos compradores, seducidos por la urgencia de las ofertas temporales, descuidan investigar previamente y creen que todos los productos están en descuento.

A esta lista también se añade el no fijarse cuáles eran los precios antes de la oferta. Esta falta de comparación en los valores puede llevar a la creencia equivocada de que están obteniendo grandes descuentos, cuando en realidad podrían haber obtenido mejores ofertas en otros momentos del año.

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Los expertos comparten algunas estrategias para realizar compras inteligentes en estas fechas. 

• Planifique con tiempo

Cuando se planea una estrategia con tiempo, notará que es más sencillo comprar y no le dolerá tanto a su bolsillo, dice la experta, quien comparte algunas pautas.

1. Haga una lista. El primer paso es acudir a un lápiz y papel o a un documento digital y escribir las cosas que necesita. Ubíquelas de mayor a menor importancia. También puede dividirlas en: necesidades personales, necesidades familiares y regalos de Navidad.
2. Ubicar el nombre del producto o el enlace (si es online). Adicional a esto, añada el nombre de la tienda donde lo va a comprar.
3. Investigue. Si tiene en mente algún producto, pero no conoce a qué tienda acudir, investigue en varios lugares y decida cuál le conviene más.
4. Por último, busque cuáles son los precios normales y anótelos. Así, cuando sea el momento, tendrá la facilidad de comparar con los descuentos que ofertan y confirmar si realmente es conveniente adquirir ese producto.

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