Se desarrolla en Guayaquil el XIV Foro Internacional Bananero. Este da a conocer la situación, condiciones, perspectivas, dificultades, orientaciones y objetivos que se proponen los empresarios dedicados a la agroeconomía mercantil de exportación.

Es preciso relievar la importancia de este sector. No es desconocido que la agroeconomía de exportación tiene en la historia económica nacional un rol transcendente de dos tiempos que constituyeron base y eje de los ingresos del país, los hoy llamados tradicionales: el cacao, ayer, y el banano desde 1950 al presente.

Por eso se dice que hablar de la economía, producción y exportación bananera se refiere al primer producto de las agroexportaciones no petroleras y también al rol como primer productor mundial. Esto por el esfuerzo de los bananeros, su emprendimiento, búsqueda de nuevos mercados, tenacidad para enfrentar los problemas y dificultades (algunas veces sin apoyo gubernamental); sin embargo, han salido adelante.

El evento, organizado por la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (AEBE), busca poner en el escenario y en el debate nacional cuánto de importante y estratégica es la dinámica de este sector. Para tal efecto se realiza en el Hotel Hilton Colón esta suerte de encuentro internacional entre el 2 y 5 octubre (hoy termina), que comprende una rueda de negocios que se realiza con Pro Ecuador. En esta se espera que se generen negocios por US$ 40 millones. En ella están presentes representantes de 50 empresas exportadoras del país, así como 13 compradores internacionales. Incluye además, una muestra comercial gastronómica, cultural y turística.

Asimismo, busca aportar importantes elementos en formación para que los bananeros conozcan nuevos y esenciales conocimientos para mejorar la situación del sector. Por eso incorporó la realización de conferencias y paneles de alto nivel, como el del comercio exterior de la Unión Europea (UE) con Latinoamérica, los nuevos cambios normativos en la UE para frutas y vegetales; retos de la comercialización de banano en los mercados: americano, UE, Rusia, Asia y Medio Oriente; “stress” en las plantaciones bananeras, el cambio climático en la producción y comercialización de banano; estatus del Fusarium Raza 4, y las navieras y los grandes cambios globales.