Referencial. Los excesos en su plato y ciertos alimentos hacen que tenga somnolencia durante las horas laborales.

Con sueno en el trabajo: lo que come le quita energia

Hay días, y no son pocos, en que después de almorzar siente un sueño casi incontrolable.

En contexto

Los excesos en su plato y ciertos alimentos hacen que tenga somnolencia durante las horas laborales.

La baja productividad y el peligro de obesidad están entre los riesgos de esa modorra diurna.

Los especialistas consultados por EXPRESO dicen qué hacer para no pasar adormitados.

Hay días, y no son pocos, en que después de almorzar siente un sueño casi incontrolable. Y no entiende qué le ocurre, si durmió bien y sin sobresaltos.

Sepa que hay una causa importante en esa somnolencia y se trata de lo que come. Si es de los que no puede resistirse a un plato lleno de arroz o a una sopa cargada de fideos y papas, allí tiene su respuesta.

Hay alimentos que provocan sueño y que es mejor evitar en horas de trabajo (vea la lista). El problema es que esa mala alimentación que lo adormita hace que su productividad baje. Tarda más en terminar una tarea y si este problema se mezcla con otros males, lo hacen perder la alerta, lo que es un riesgo si maneja maquinarias.

La somnolencia produce cambios en la conducta, lentitud mental, disminución del parpadeo... Según las clínicas del Sueño de España, esta es la causa del 20 % de los accidentes de tránsito y de los laborales. Pero eso que come no solo lo adormita, a mediano plazo lo puede llevar a problemas de salud como la obesidad.

Los especialistas consultados por EXPRESO muestran qué hacer para vencer la modorra y qué comer. Además, le explican por qué se produce ese exceso de sueño, que puede durar horas.

Evite en horas laborales

Los excesos

Comer en exceso es una de las causas más comunes de la somnolencia, mucho más si ese plato es rico en carbohidratos y no tiene acompañantes de otro tipo. Cuando eso ocurre, el cuerpo tiene que producir más insulina de lo normal. Ese proceso baja los niveles de azúcar en la sangre y también reduce el nivel de energía.

Los dulces

Aunque el primer efecto luego de comer un dulce es el aumento de la energía, al poco tiempo esta se apaga y entonces se produce el efecto contrario: cansancio. Sepa que luego de consumir azúcar un producto químico llamado serotonina se produce en el cerebro y se trata de un neurotransmisor relacionado con el sueño y con la depresión.

Los lácteos

Estos productos contienen el aminoácido triptófano, que es una sustancia que puede inducir a la somnolencia. El efecto relajante es más notorio cuando se comen quesos duros, que tienen más calcio. Por eso, a quienes tienen problemas para dormir se les aconseja un vaso de leche caliente al acostarse.

Los plátanos

Son una gran fuente de nutrientes y tienen el poder de evitar los calambres, pero también pueden tenernos todo el día bostezando. ¿Por qué? Por los niveles de azúcar que contienen, pero también por su gran cantidad de potasio y magnesio, lo que relaja los músculos y puede hacernos sentir modorra.

Las ensaladas

¿Es de los que gusta llenar su plato de lechuga y prácticamente nada más? No es buena idea. No acompañarlas con otros alimentos hace que la comida no sea equilibrada. Esta debe incluir proteínas y carbohidratos saludables, de lo contrario será casi imposible no sentir sueño durante el día.

Las almendras

Estos frutos secos son recomendados para reducir los niveles de colesterol, pero además pueden provocar sueño. Son ricos en magnesio y aminoácido triptófano. Esta combinación de nutrientes promueve una relajación instantánea que, si se combina con otros productos similares, nos hace adormitar.

Sepa cómo

Un buen descanso

Muchas veces el problema de la somnolencia es causado por no descansar bien en la noche. Para evitar esos problemas de insomnio que le pasan factura en el día, acuéstese a dormir y levántese todos los días a la misma hora.

Haga ejercicios

La falta de ejercicio también provoca sueño. Intente mantenerse activo y haga algún tipo de actividad de lunes a viernes, como caminar al menos media hora diaria. Una caminata de 10 minutos después del almuerzo, también ayuda.

Ponga música

Si es de los que no se distrae en horas de trabajo cuando escucha música, es una buena opción que se coloque los audífonos. Pero no escoja canciones románticas o música clásica o tradicional. Prefiera rock y pop.

Inicie un debate

Una opción que recomienda la revista especializada Journal du Net es conversar con un compañero sobre un tema en el que no estén de acuerdo. Así se incentiva la capacidad cerebral y contribuye a estar en estado alerta.

Un poco de café

Tome café, pero en dosis bajas para que la cafeína se extienda durante el día, permitiendo que el cuerpo se mantenga más alerta, lo que hará que su efecto sea más duradero. Consumir agua también lo despierta.

Miriam Villalta / Licenciada en nutrición

Inicie bien la jornada

Si no quiere pasar el día adormitado, recargue energías con el desayuno.

1.Ningún extremo es bueno

No se salte el desayuno. Tampoco se exceda, como ocurre cuando come calentado de arroz con menestra y bistec, que suele acompañarlo con colada.

2. La opción para una persona sedentaria

Desayune un vaso de jugo que puede ser de naranja, de toronja o de melón, pero de ser posible sin azúcar. Si siente que está muy ácido, póngale stevia o, en último caso, azúcar morena, miel o panela, más una taza de café con leche que puede ser descremada. Si es intolerante a la lactosa, tome leche de almendras o de soya. Acompáñelo con un sánduche con un pan bolillo con queso o una tortilla de verde con queso.

3. Lo que deben comer los que se ejercitan

Tome jugo, una porción de fruta o un batido de leche de soya con banano. Coma un revoltillo con dos huevos, con cebollines y pimiento. Agregue una rodaja de pan un poco tostada o dos tostadas pequeñas.

Karla Toro / Nutricionista-dietista

Cómo llenar su plato

Si debe comer en su trabajo, tenga en cuenta estas sugerencias para que no lo venza el sueño:

1. Escoja solo un carbohidrato

Una mala combinación es comer tallarín con arroz o sopas con papa y fideo. Prefiera un solo carbohidrato y que sea de absorción lenta como las harinas integrales y las leguminosas, como las lentejas y el fréjol. Ayudan a controlar los niveles de azúcar en sangre y evitan el sueño.

2. La comida rápida no es buena elección

También evite las grasas saturadas, la sal, el azúcar, los aditivos y los conservantes, como el de las comidas rápidas. Prefiera las proteínas de cortes magros (sin grasa).

3. Deje el plato con la sopa

Las sopas no son nutritivas, pues se recocinan los vegetales y pierden su valor nutricional. Suelen tener mucha grasa y carbohidratos cuando se preparan en la calle.

4. El postre también le dará somnolencia

No coma postres ricos en harinas refinadas y azúcar blanca. No brindan ningún beneficio nutricional.

Wladimir Molina / Médico ocupacional

Tiene riesgo de enfermar

El problema de la mala alimentación va más allá de esa sensación de sueño.

1. Sin tiempo para tomar una siesta

Cuando uno se alimenta con exceso de hidratos de carbono, tiende a sentir sueño. De jóvenes, podemos tomar una siesta, pero cuando empezamos a trabajar, el tiempo de almuerzo se limita a media hora o veinte minutos. A veces comemos al apuro y eso hace que sintamos somnolencia.

2. Que un especialista elabore el menú

Muchas veces el operario de fábrica quiere una comida abundante, mucho arroz, papa y harinas. Estamos más acostumbrados al volumen que a la calidad. El exceso de hidratos de carbono se va a convertir en obesidad. Se recomienda que el menú sea elaborado por un nutricionista para que tenga el equilibrio adecuado.

3. Para que no baje la productividad

Con una alimentación saludable, habría personas más productivas y que se enferman menos. Lo contrario perjudica también a las empresas, pues puede haber ausentismo laboral.