La ministra de Salud, Ximena Garzón, calificó como un nuevo 'brote' epidémico el actual incremento de casos de COVID-19 en el país, ocurrido tras el arribo de la variante ómicron; y prevé que las cifras de contagios sean mayores a los de la fase inicial de la pandemia.  

"Estamos en un nuevo brote", dijo la autoridad durante un conversatorio virtual con medios de comunicación, este martes 4 de enero. Señaló que se han duplicado las cifras de casos diarios en muchas partes del país y que la positividad había subido al 20% en las pruebas específicas de PCR  y al 30 % en los test de antígenos o anticuerpos.

Contrastó con las datos de septiembre, cuando el número de pruebas positivas de cada 100 que se realizan era inferior a 5, que es el indicador internacional de que una epidemia está controlada. La situación cambió tras el feriado de noviembre y se ha agravado con la presencia de la variante ómicron, la de más alta capacidad de transmisión hasta ahora. 

La ministra defendió  que, sin embargo, en la mayoría de casos de infectados, los síntomas son moderados o leves y lo atribuyó al efecto de la vacunación contra la COVID-19, que ha cubierto ya a casi el 80 % de la población del país.

Pero también advirtió que el creciente número de infectados puede elevar la demanda de camas de hospitalización y también en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). Indicó que el porcentaje de muertes en exceso ha subido de 9,2% a 13,8%, aunque recordó que alllí se mezclan todas las causas de  fallecimientos y no solo de las de COVID-19.

"Hasta el 15 de enero vamos a seguir viendo un aumento de casos, pero menos mal que estamos vacunados", dijo la ministra y agregó que esa fecha será previsiblemente la del pico de este nuevo brote. "Vamos a tener probablemente más casos que al inicio de la pandemia", expresó.

Garzón instó a vacunarse contra la COVID-19 como principal medida de protección, sea la primera, segunda o tercera dosis. Además de mantener los cuidados ya conocidos como el uso de mascarilla y distancia social.