Las protestas de los comuneros de las poblaciones cercanas a la planta de tratamiento de residuos de El Inga, en el suroriente de Quito se tornaron violentas la mañana de este martes 25 de enero.

Luego de que los acercamientos previos entre pobladores y personeros de la Empresa Metropolitana de Residuos Sólidos (Emgirs) no dieran resultados. Los primeros decidieron tomarse la entrada de la planta para evitar el paso de los vehículos pesados.

Al sitio llegaron agentes de la Policía Nacional y Agentes Metropolitanos para controlar las protestas pero terminaron enfrentándose. Hubo cruce de palos y piedras, mientras que los uniformados respondieron con gas lacrimógeno y gas pimienta.

Los comuneros se tomaron la vía principal, radicalizando el pedido de que la nueva gerente de Emgirs, Maricruz Hernández, dejara el cargo, pues desde 2019, según los dirigentes, no reciben las compensaciones económicas por las afectaciones ambientales.