El vals peruano y el mariachi tienen ritmos musicales diferentes, pero tienen en común que han conquistado al mundo. Algo parecido está ocurriendo con los licores típicos de estos dos países: el pisco de Perú y el tequila de México.

La exportación de pisco de Perú entre enero y agosto de 2019 acumuló un incremento de 21 % respecto al mismo periodo del año pasado. Hay una mayor demanda en Estados Unidos, que es su principal mercado, pero también de otros como Países Bajos, Ecuador y Francia, según la Asociación de Exportadores de Perú (ADEX).

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El crecimiento en Ecuador es de 153 %, dijo ADEX. “Pero es marginal”, explicó Felipe Cordovez, presidente de la Asociación de Importadores de Licores de Ecuador. Sin embargo, es importante porque todo suma a la hora de hacer las cuentas.

Referente al tequila, indicó que el mercado ecuatoriano tiene la expectativa de que este licor mexicano baje de precio cuando Ecuador sea parte de la Alianza del Pacífico. Se proyecta que al bajar el costo el consumo subiría, una situación parecida a lo que pasó con los licores europeos; la venta subió tras el acuerdo comercial con la Unión Europea.

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Cordovez agregó que las ventas de los licores importados van de la mano con la situación económica de Ecuador, por lo tanto como no está en su mejor momento, pues la compra tampoco es exponencial. Se estima que las ventas de los licores importados general en Ecuador este año suban un 6 %, el año pasado el incremento fue de un 15 %. “El crecimiento de este año no es el mejor, pero tampoco es tan bajo como para quejarnos”.