El miércoles 15 de noviembre, el Papa Francisco recibió de regalo un auto Lamborghini-Huracán, de color blanco con detalles dorados. El increíble vehículo tiene la capacidad de alcanzar hasta los 300 km/h, y un precio aproximado de 230.000 euros.

Pero el argentino no pretende quedárselo. Según la prensa del Vaticano, el increíble auto será subastado con la intención de ayudar, por Navidad a fundaciones que se dedican a labores sociales; una de ellas es el proyecto que consiste en la reconstrucción de las comunidades cristianas en Irak, que fueron atacadas por el movimiento terrorista islámico.