Renate Wedel y su esposo Alfred Weden vivieron desde 1975 en el pueblo de Weiperfelden, en el municipio de Waldsolms, en el corazón de la Alemania profunda. Él murió en 2014 y Renate falleció en diciembre de 2019, pero recientemente se conocieron detalles de su generosa herencia dejada a... sus vecinos.

Entre acciones e inmuebles, los habitantes del municipio han heredado 6,2 millones de euros (unos 7,5 millones de dólares), detalla la prensa.

En abril, se informó al municipio de Waldsolms, que agrupa otros cinco pueblitos además de Weiperfelden, que Renate Wedel había legado una cuenta bancaria, acciones y varios objetos de valor.

Nadie se lo esperaba.

Alfred Welde, informa CNN, es recordado como un hábil jugador del mercado de valores y un hombre exitoso. De ahí, el origen de su riqueza.

No obstante, Renate Wedel puso una condición. Eso sí, esta no es un capricho y algo difícil de cumplir, sino que busca que el dinero sea utilizado de manera sensata. El testamente indica que los 7,5 millones de dólares se empleen en "estructuras e infraestructuras para la comunidad".

Así, el alcalde del municipio indica que con el dinero se financiarán vías para ciclistas, nuevos edificios y un jardín para niños. Además, los vecinos han sugerido que se emplee para una piscina al aire libre, mejorar el transporte público y construir instalaciones para los niños de la comunidad.

"La comunidad de Waldsolms desea agradecer al Sr. y la Sra. Wedel por este importante legado", dijeron las autoridades en un comunicado. "Lo usaremos responsablemente, mejorando nuestra comunidad para el bien de todos y honrando la memoria de ambos".