Jeff Bezos, el director ejecutivo de Amazon y el hombre más rico del mundo, anunció el pasado lunes 17 de febrero que va a aportar 10.000 millones de dólares de su bolsillo para luchar contra la crisis climática a través de una nueva iniciativa bautizada como Bezos Earth Fund.

Se trata de un fondo destinado a financiar a científicos, activistas, organizaciones sin ánimo de lucro y "cualquier esfuerzo que ofrezca una posibilidad real de ayudar a preservar y proteger el mundo natural”, según las palabras del empresario en su cuenta de Instagram.

Bezos, quien ha sido presionado por los empleados de Amazon en temas climáticos, dijo que esperaba comenzar a otorgar subvenciones este verano. "El cambio climático es la mayor amenaza para nuestro planeta", escribió. "Quiero trabajar junto a otros para amplificar las formas conocidas y explorar nuevas formas de combatir el impacto devastador del cambio climático en este planeta que todos compartimos".

Al contrario que otros magnates bien conocidos por su filantropía, como Bill Gates, Bezos no la ha ejercido históricamente. Con un patrimonio neto de 130.000 millones de dólares -según la revista Forbes- Bezos prefirió centrarse en Amazon y otras empresas privadas, como Blue Origin, que fabrica cohetes o el medio escrito The Washington Post, del cual también es dueño.

En septiembre del año pasado, la compañía desveló por primera vez su huella de carbono: en el ejercicio anterior (del año 2018), había emitido 44,4 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera, el equivalente a quemar la gasolina contenida en unos 600.000 camiones cisterna.