Casi como cada noche desde que comenzaron las protestas del movimiento indígena el lunes pasado, al atardecer de este domingo 19 de junio de 2022 el ambiente se volvió a caldear. A medida que avanzaba la protesta hacia el corazón de Quito por el sur de la capital, por la Panamericana Sur, la tensión se tomaba el ambiente. El acceso a la ciudad por carretera volvió a quedar bloqueado.

El cara a cara entre manifestantes y militares condujo a un enfrentamiento repelido con gases lacrimógenos. Mientras desde los barandales de la vía, arrojaban piedras a los uniformados. El enfrentamiento detonó tras casi una hora de tensión y diálogo que no llegó a buen puerto.

Uno de manifestantes indicó a EXPRESO antes de la bronca que el grupo que estaba cortando el paso en la carretera espera la llegada de “otros compañeros indígenas”, quienes están ya en el desvío a Tambillo viejo, a un kilómetro y medio de distancia. Un fuerte contingente militar llegó a bordo de siete camiones, para controlar la zona.

El jefe del comando conjunto de las Fuerzas Armadas intentó dialogar con los integrantes de la protesta para que permitan el ingreso a Machachi. No fue concedido el pedido y ambas fuerzas se encuentran en el sitio. Al contingente militar se incorporaron camiones y maquinaria pesada para retirar los obstáculos de la vía. 

A la par, los manifestantes formados por comuneros de Chimborazo y Cotopaxi recibieron el refuerzo de más miembros llegados en camiones. Los militares formaron un cordón en la carretera, en los dos sentidos de circulación, con el fin de impedir el avance de la protesta y más obstaculización de las vías. Los manifestantes mantuvieron el pulso y forzaron a que la línea militar retrocediera en su avanzar. 

La intención de los manifestantes es apostarse en el centro de Quito la noche del domingo, después de un fin de semana en el que el presidente Guillermo Lasso decretó medidas de acercamiento a las peticiones de la Conaie pero también un toque de queda nocturno en la capital. A lo que Leonidas Iza respondió ratificando su intención de mantener el paro y avanzar con la protesta desde las afueras de la ciudad hasta el interior. La movilización pretende llegar el lunes hasta el Palacio de Carondelet.

En el sector de Santa Rosa también llegó un grupo de militares con el propósito de no permitir el paso de la protesta. Algunos tramos de las arterias principales que conectan el sur de Quito con el norte de Mejía quedaron bloqueadas.

En el sector de San Juan de Turubamba, los protestantes cercaron la vía en ambas direcciones y no permitían el paso de los vehículos. El coronel de Policía Jimmy Viteri comentó que dichas avenidas fueron cerradas desde las 14:00 y que han negociado con los manifestantes para que dejen una libre circulación.

Una dirigente del sector dijo que no permitirán el paso de camiones con alimentos o víveres porque según ella, "todos deben apoyar en el paro". Otros tramos de la avenida Maldonado y Simón Bolivar que conectan a la Parroquia de Cutuglahua fueron obstaculizadas con troncos y llantas incineradas.