Requerido. Ever Banega firma autógrafos en las afueras del hotel, en EE. UU.

La hora de Banega con Argentina

Relegado. Ante la sorpresa de la afición, el técnico Alejandro Sabella lo dejó al volante afuera de la lista para el Mundial 2014.

SEATTLE Se quedó afuera del Mundial de Brasil-2014 y falló uno de los penales que costaron el título ante Chile en la última Copa América. Pero el fútbol da revancha y a Ever Banega parece haberle llegado la hora con Argentina.

El volante de 27 años vive un verdadero momento de ensueño, ya que ha sido transferido del Sevilla de España al poderoso Inter de Milán y acaba de ser padre por segunda vez.

La frutilla del postre podría ser la Copa América Centenario 2016, que arrancó con todo para Banega: titular en los dos partidos de Argentina y que marcó un gol y dio una asistencia ante Chile (2-1).

Esa noche en Santa Clara (California, oeste), se cobró una pequeña deuda por aquel penal fallado un año atrás en el estadio Nacional de Santiago. “Ese penal va a estar siempre en mi cabeza. Me tocó patear y lo volvería a hacer, no tengo dudas. No lo va a errar el que no está en ese momento, pero fue algo muy doloroso”, afirmó recientemente.

En Estados Unidos, como muchos de sus compañeros, quiere borrar recientes frustraciones y saldar la deuda de 23 años sin títulos para la albiceleste, desde la Copa América de Ecuador-1993.

Al igual que el astro Lionel Messi y Ángel di María, Banega es oriundo de Rosario, la ciudad portuaria ubicada 300 km al norte de Buenos Aires, y que creció en una familia muy humilde. “Con mis hermanos mayores, Luciano y César, jugábamos en categorías distintas y calzábamos parecido. Entonces, cuando terminaba un partido, nos sacábamos los botines y se lo dábamos al que le tocaba jugar”, contó.

Debutó en febrero de 2007 con Boca Junior. Se ganó la titularidad y fue transferido al Valencia de España por 26 millones de dólares. EFE