El Departamento de Protección de Puertos y Fronteras de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés) publicó el número de ecuatorianos detenidos, expulsados y deportados en su territorio. Según el informe, en los últimos once meses son 101.795 migrantes del país los capturados por estas brigadas.

El estudio comprende de octubre de 2022 hasta el 31 de agosto del año en curso. Una cantidad que rebasó los registros de la ola migratoria de 2021, cuando 97.074 compatriotas no pudieron ingresar a suelo estadounidense.

Hasta mediados de 2021, México y Guatemala no pedían a los ecuatorianos visa para entrar a su territorio, por razones de turismo. Pero ese beneficio fue usado para argumentar una supuesta estadía de vacaciones y realmente llegar de forma irregular a Estados Unidos.

La organización 1800 Migrante expuso en un comunicado que no se puede “ignorar” el “éxodo” sostenido y que, peor aún, “el gobierno ecuatoriano se mantenga callado, es una crisis humanitaria en la que Ecuador debe asumir su corresponsabilidad en esta tragedia social”.

El representante de esta organización, William Murillo, agregó que ese listado dado por Estados Unidos “no cuenta el número de ecuatorianos que ingresan con visa y se quedan, o de los ecuatorianos que sí lograron burlar los controles fronterizos e ingresan al territorio. Entonces, me atrevo a decir que fácilmente los ecuatorianos superamos los 200 mil ingresos a Estados Unidos entre registrados y no registrados en lo que va del año”.

En julio pasado, el Gobierno norteamericano llamó a Ecuador para abrir un Centro Regional de Procesamiento (RPC) migratorio. Así lo confirmó el ministro de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Gustavo Manrique, quien afirmó que se buscaba trabajar en la reagrupación de las familias y entregar visas circulares.

Las visas circulares son permisos temporales para trabajos de ocho a nueve meses en ese país, de forma que después puedan retornar a Ecuador.

“Estados Unidos nos ha pedido a varios países que tratemos de abrir centros de atención para recibir la información de la gente que quiere ir y tratar de hacer un proceso más ordenado, en la medida posible”, comentó Manrique en aquella ocasión. No obstante, desde ese anuncio no se han dado más detalles para conocer si ha avanzado la propuesta anunciada.

El desplazamiento irregular de ecuatorianos tuvo eco en las declaraciones del alcalde de Nueva York, Eric Adams, quien sostuvo que la población ecuatoriana inmigrante es parte del “gran problema” que va a destruir la administración de su territorio, al precisar que debido al masivo ingresos de extranjeros habrá un déficit de $12.000 millones, en recortes de servicios a los neoyorquinos

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