¿Cuánto mueve el mercado de acciones, que el Gobierno busca controlar en Ecuador?
El año pasado, estas transacciones descendieron un 17 %
El Gobierno Nacional anunció este lunes la implementación del primer control masivo sobre las utilidades generadas por la compra y venta de acciones en Ecuador, una medida sin precedentes que buscará combatir la evasión fiscal en el mercado bursátil nacional.
La vocera oficial de Carondelet, Carolina Jaramillo, informó que el Servicio de Rentas Internas (SRI) iniciará una fiscalización directa del Impuesto a la Renta Única (IRU) que aplica a las ganancias obtenidas en las transacciones bursátiles. Con ello se apunta a regular actividades que han permanecido fuera del radar tributario y atacar "conductas defraudatorias de quienes ocultan el valor real de sus operaciones". Pero, ¿qué tan grande es este mercado al que hoy se busca controlar?
Un mercado en contracción, bajo la lupa
El mercado bursátil ecuatoriano experimentó una contracción del 17% en 2024, moviendo $ 47,131,089.66 frente a los $ 56,899,660.43 registrados en 2023. La Bolsa de Quito concentró la mayor actividad con $ 31,963,704.52, mientras que Guayaquil registró transacciones por $ 15,167,385.14.
A pesar de estos montos, el Gobierno ha identificado una significativa brecha en el cumplimiento tributario. Según Jaramillo, hasta el momento solo 300 contribuyentes han declarado voluntariamente sus utilidades bursátiles, reportando un promedio anual de $ 30 millones.
Venta de acciones: 6.000 contribuyentes en la mira
La cifra más reveladora del anuncio es la detección de un universo potencial de 6.000 contribuyentes adicionales que no han cumplido con la obligación de declarar sus ganancias bursátiles.
El experto tributario Ismael Vélez se muestra incrédulo del universo de contribuyentes al que se busca controlar, pues se trata, dice, de un mercado aún muy pequeño, pues no mueve ni el 1 % del mercado bursátil. En el 2024, su participación fue de un 0.30%.
El experto aclaró que el anuncio, tal como fue emitido hoy, no implica la creación de nuevas tasas sobre las ganancias bursátiles, sino el inicio del control efectivo de una ley ya existente. Esto significa que los contribuyentes que han evadido esta obligación enfrentarán no solo el pago del impuesto adeudado, sino también multas e intereses por mora.
Este anuncio, dice, incluso podría llevar a revisar las transacciones que se han hecho desde el 2020, y cobrar de forma retroactivamente porque la norma permite hacer este control desde los últimos cinco años.
Pero Ricardo Flores, exsubdirector del SRI, aclaró que el control también se aplicará sobre aquellas compañías que compran y venden acciones por fuera del mercado bur´sátil. Allí, dice, los montos que ese mueven son superiores, pero resulta difícil medirlos. “Son transacciones privadas. Salvo por la información que el SRI hace pública de cuánto se ha pagado por ese impuesto, no se puede saber el monto que se movió en ventas de acciones”, señaló.
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