Las deudas del Ministerio de Salud Pública (MSP) y del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) han puesto al límite a los prestadores externos, que atienden casos de alta complejidad y emergencias.

Ana Delgado Cedeño, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Clínicas y Hospitales privados del Ecuador (Achpe), conversó con EXPRESO y explicó que la falta de pago hace que las instituciones privadas de salud experimenten un grave problema de liquidez, por lo que incluso ya no pueden atender a todos los pacientes que llegan derivados de casas de salud pública.

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“En nuestro rol de red complementaria de salud tenemos el compromiso de atender a los pacientes, pero llega un momento en que es muy difícil cumplir con ese rol. Ya no se trata de querer atender sino de poder atender, la demanda a la red pública supera a su oferta de servicios”, manifestó.

Delgado mencionó que hasta diciembre del 2022 el MSP les adeudaba 140 millones de dólares (en 2023 el MSP ha realizado pagos) y el IESS unos 340 millones (en 2023 el IESS ha hecho algunos pagos, pero el valor por las nuevas atenciones sigue incrementando la deuda). Por tal motivo, han tenido que disminuir el número de pacientes atendidos.

La deuda es tan alta que los proveedores ya no pueden proporcionar los insumos, medicamentos y servicios a las empresas de salud, creando así un círculo vicioso que acaba afectando especialmente a los pacientes.

Esta situación también la padecen los centros de diálisis del Ecuador. Su vocera, Cristina Freire, dice que en este momento es complicado prestar servicios, porque los pagos del IESS y el MSP se están dando con demasiado atraso. Se encuentra preocupada, ya que se prevé que el abastecimiento de los insumos dure hasta octubre.

La situación se vuelve crítica para los meses posteriores si el MSP no cancela la deuda de 10 millones de dólares. “Si no cancelan, se ve en riesgo la atención del paciente renal”.

Cada mes los centros de diálisis necesitan 13,5 millones de dólares para atender a los 16.000 pacientes derivados del MSP.

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La ley dice que como máximo pueden pagar con atraso de tres meses (90 días). “Más de ese tiempo no, pero ni el MSP ni el IESS lo cumplen y vienen pagando con atraso desde hace varios años”, añadió Freire.

Por su parte, José Ruales, ministro de Salud, señaló que estableció un plan de pagos con una inversión de 115 millones de dólares para cubrir los valores auditados en esta cartera de Estado. De ese monto, se asignarán 30 millones para el servicio de dializadoras. A las clínicas y hospitales privados les cancelarán 62 millones de dólares.

Para José Jouvín, presidente del Consejo Directivo Nacional de Solca, no pueden suspender el servicio porque hay vidas humanas que dependen de la atención. “En la medida en que los pagos se realicen entre los 60, 90 hasta 120 días, es una operación rentable, pero tenemos cartera vencida de 500 días, porque se arrastran saldos que aunque están justificados se demoran en pagar”.

Según el MSP, está gestionando los recursos para cumplir con la deuda a prestadores privados. El plan de pagos empezó el 30 agosto de 2023.

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