El primer recital del maestro será el 21 de abril a las 19:00 en el Teatro Centro Cívico.

Dante Anzolini: “Es mi obligacion aumentar el patrimonio ecuatoriano”

Dante Anzolini. Es un músico, compositor y director ítalo-argentino. Ha trabajado en varios países, entre ellos Austria, donde lideró la Bruckner Orchester Linz. Ha presidido también la Orquesta del Beethovenhalle de Bonn; la Sinfónica de Berna; las o

A Guayaquil casi no llega. El avión que debía traerlo fue evacuado dos veces. El porqué nunca lo supo. Lo que sí tenía claro es que el reloj marcaba las 04:00 y a las 08:00 debía levantarse a dirigir a la Orquesta Sinfónica de la ciudad por primera vez. No creyó que lo lograría, pero lo hizo y ahí, en ese primer encuentro, surgió una química que lo enamoró.

- ¿Había escuchado alguna vez del ensamble de la ciudad antes de aplicar a la convocatoria?

- Lo único que sabía de Guayaquil era dónde quedaba, pero a Ecuador sí había venido antes. Tuve una muy grata experiencia dirigiendo a The Youth Orchestra of the Americas en Quito y me llevé una gran impresión de su música y su gente. En esa visita tuve la suerte y la casualidad de conocer a varios compositores y quedé muy impresionado.

- ¿Cuál fue su primera impresión de la orquesta?

- Vi que la calidad estaba presente. Respondían de manera viva y clara. En poco tiempo podía recibir respuestas cada vez mejores de ellos. Luego hay algo muy subjetivo y tiene que ver con las miradas. Vi que había una química entre ellos y yo que me intrigó.

- ¿A qué obstáculos se enfrenta un director que llega a una orquesta ya consolidada?

- No creo que sean obstáculos. Hay una estructura establecida. Yo debo conocerla, y a esos integrantes, para ver cómo se consiguen los objetivos planteados. Es insertarse en un sistema, y buscar que la gente produzca lo mejor de sí. Mi única función es hacer que el público se emocione, que salga queriendo revivir esa experiencia.

- Hablamos de objetivos planteados. ¿Cuáles son estos?

- Bueno, cuando obtuve el repertorio previo de la orquesta, lo primero que pensé es que, tanto a ellos como al público les iba a interesar que yo no repita mucho, sino que haga música nueva. Quiero hacer la música simbólica de la cultura occidental, la que la orquesta no ha tocado hasta ahora. Quiero hacer un ciclo de Mahler, también de Ravel, Bach, y, entre otras, ‘La consagración de la primavera de Stravinsky’, que es un clásico.

- ¿Qué espacio tiene la música ecuatoriana en este proyecto?

- Es una parte fundamental. Es mi obligación, procurar aumentar el patrimonio ecuatoriano. Me interesa hacer la mayor cantidad posible de música ecuatoriana; Salgado, Moreno, Guevara. Quiero rescatar algunas partituras que están en el Archivo Nacional de la Música en Quito y recuperarlas, darles vida.

- Usted ha llegado en una época de convulsión...

- ¿Lo dice por las elecciones?

- No necesariamente. En la cultura también se dan convulsiones. ¿Considera que hay espacio para la política en el arte?

- Podría darle dos respuestas, una fácil y una difícil. Podría decir que no, pues lo que yo hago, la música, cabe en todos los estratos sociales, emociona igual. ¿Qué interesan las ideologías en la belleza del arte?

- ¿Y la respuesta difícil?

- La respuesta más complicada es que la política sí debe tener cabida en el arte.

Haciendo lo que hago, hago un servicio social. ¿Por qué? Porque la música puede inspirar. Hay chicos en los barrios bajos, y lo sé porque yo era uno, que descubren en la música algo que les da de comer, Yo nací en un barrio obrero; sin la música, nunca habría salido de ahí. Y ahí sí cabe la política, porque eso es política cultural, y no solo debe concentrarse en la música clásica.

- Su amor por la música va más allá de lo académico entonces...

- (Sonríe) Claro. Yo de chico toqué rock, toqué tango, toqué música folclórica...

- A poco más de una semana de su primer recital como director, ¿qué expectativas tiene?

- Me encantaría sorprender, que el público salga sin saber qué pasó. Este primer concierto es un mensaje claro de hacia dónde va la orquesta y quisiera que la gente lo entienda.