El presidente Daniel Noboa aprendió a ‘ver marcadores’ y a entender que el número más alto es el que gana, por lo que al resultado de 9 a 2 en la consulta lo considera como una ganancia. Dos de las 11 preguntas no fueron aprobadas en las urnas. Lo que aún no entiende es que ahora tiene desafíos que lo presionarán más en una etapa preelectoral, según expertos.

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Se espera que el Consejo Nacional Electoral (CNE) promulgue los resultados oficiales de la consulta para que en cinco días, a partir de ese momento, Noboa envíe a la Asamblea Nacional los proyectos de reformas relacionados a los temas de las nueve preguntas aprobadas.

El primer mandatario gana la consulta por cuatro factores, dice el analista político Rodrigo Jordán. La consulta se realizó a pocos meses de haber asumido la Presidencia y no hay tanto desgaste de su imagen; la mayoría de preguntas se referían a los temas de mayor preocupación de los ecuatorianos, que son inseguridad, violencia y narcotráfico; es un presidente con un buen capital político por sus acciones iniciales en seguridad; y se trató de una consulta que iba a medir su popularidad.

Evalúa que si bien no hubo un triunfo avasallador, “el Gobierno no se da cuenta de que esta consulta le pone mucha más presión al desgaste político que va a tener Noboa en adelante”.  

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El jefe de Estado tiene un cheque en blanco que le ha dado la ciudadanía, pero si en los próximos meses el país sigue siendo víctima de la inseguridad, se pone en riesgo su reelección porque se genera más presión y expectativas para que resuelva los problemas, reflexiona Jordán. Tiene que dar resultados, los cuales no se están viendo desde marzo, por el incremento de los asesinatos, incluidos de alcaldes.

Hay dos tiempos de percepción distintos: los legales y el de la ciudadanía. Para la gente, el haber aprobado esta consulta popular es darle un voto de confianza nuevamente al presidente, para que las cosas cambien en el corto plazo, explica. 

Otro factor de riesgo para la reelección “es que la situación de Ecuador se puede degradar mucho de cara a la campaña electoral, porque el pico de popularidad de Noboa ya pasó. Hoy todo va a ser en bajada, por lo que está pasando en economía, empleo, inseguridad, incluso los apagones”.

El mensaje en las urnas es combatir con mano dura a la narcodelincuencia, señala el analista electoral Alfredo Espinosa. Cree que con los resultados de la consulta se afianza la posibilidad de una reelección, pero eso también acarrea “una responsabilidad enorme porque las expectativas son altas”.

 El Gobierno debe administrar el triunfo de la consulta “operativizando los criterios de los ciudadanos expresados en las urnas, a través de una política pública eficiente, que permita tener la certeza de que su mandato no quedó en letra muerta”. Precisa que hace falta una crisis de gabinete para que Noboa renueve a sus ministros.

Para el expresidente Lucio Gutiérrez, con los resultados de la consulta Noboa tiene desafíos por cumplir. Con esto coincide el legislador de ADN Adrián Castro. “Es un reto enorme para el presidente y para todos”.

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