Los comuneros de Libertador Bolívar, al norte de Santa Elena, culminaron la construcción de sus dos puentes de madera que el pasado 21 de febrero terminaron destruidos por el desbordamiento del Río Atravezado, después de una intensa lluvia que duró más de seis horas.

“Con esfuerzo de todos se logró la construcción de los dos puentes. El Municipio de Santa Elena puso parte del material y la comunidad la mano de obra. Ahora, a esperar que no haya otra crecida del río”, relató Rolando de la Rosa, presidente del cabildo comunal.

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Mientras los pobladores de Libertador Bolívar se recuperan del gran susto que les causó la fuerte precipitación, en las comunas San Marcos y Los Manguitos de la parroquia Colonche, al noreste de Santa Elena, las lluvias mantienen inundada a una gran parte de estos dos lugares.

“Esto no es nuevo para nosotros, cada vez que llueve el agua se acumula en las calles y se forman tremendas lagunas frente a las casas. Hemos pedido a las autoridades solución, pero solo nos traen algo de raciones alimenticias y el problema sigue”, reclamó el ciudadano Cristian Lima.

Por los inconvenientes, varios negocios se encuentran cerrados. Miembros de familias con niños y adultos mayores, que tienen que salir en busca de alimentos, caminan entre el lodo o pasan por las aguas acumuladas. “Luego de esto, se vienen los mosquitos que traen enfermedades. Por acá nos sentimos abandonados”, comentó la moradora Lourdes Beltrán.

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