Ante todo, una advertencia. La Comisión Nacional Anticorrupción (CNA) alerta que ante el anuncio de la convocatoria a una consulta popular que prepara el Gobierno Nacional, esta pueda convertirse en "un artificio para eludir la opinión nacional sobre el manejo inadecuado del poder en diversos frentes". En un corto comunicado publicado en su cuenta oficial de Twitter, el grupo ciudadano continúa advirtiendo que espera que el eventual llamado a las urnas no se convierta en "una cortina de humo para revertir los resultados electorales de febrero de 2023 o para impulsar sesgadamente los fines eleccionarios del régimen". 

La consideración de un llamado a consulta popular se baraja en medio de una crisis de inseguridad recrudecida con el atentado en el barrio Cristo del Consuelo en el que murieron cinco personas. Y pocos días después de que se revelara un escándalo que involucra al ahora consejero de Gobierno, Aparicio Caicedo, en la selección del superintendente de Bancos, Raúl González. "Algunos Consejeros de Gobierno han devenido en tramitadores de objetivos políticos del régimen y en operadores del tráfico de influencias y de la injerencia en otras funciones del Estado como parte de sus actividades", comentó en su momento Germán Rodas, coordinador nacional de la Comisión Anticorrupción. 

La Comisión concluye su comunicado comentando que si la consulta pretende ser transparente, "debe afrontar los temas de modificación estructural que demanda la sociedad ecuatoriana". De momento, lo poco que se conoce de esta eventual convocatoria a las urnas es que serían 10 preguntas. Algunas preguntas relacionadas a la inseguridad y la corresponsabilidad de los gobiernos locales. También sobre las facultades del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social. No se descarta abordar cambios en la Asamblea Nacional como la bicameralidad.