
Los cerros, desprotegidos de casos de extraviados
Cada semana la organización Cerros Vivos, que trabaja por la conservación del cerro El Paraíso, recibe solicitudes para realizar recorridos y paseos ecoturísticos en el lugar, pero todas son negadas.
Cada semana la organización Cerros Vivos, que trabaja por la conservación del cerro El Paraíso, recibe solicitudes para realizar recorridos y paseos ecoturísticos en el lugar, pero todas son negadas.
¿La razón? Lo inseguro que ahora resulta ingresar y salir de este bosque protegido de la ciudad.
Una prueba de ello fue el extravío de dos adultos y tres menores que se suscitó la tarde del pasado domingo 13 de agosto.
Según la información que proporcionó esa noche el ECU 911, las personas habían llegado en la mañana para recorrer solos el cerro ubicado en la ciudadela del mismo nombre y cuando quisieron salir no encontraron el camino de regreso. Fueron encontrados cerca de las 22:00.
“El padre llevaba la batuta y fueron a buscar la cascada, pero tipo 17:30 todo se pone gris y sumado al gran crecimiento de la vegetación se les hizo casi imposible trasladarse hasta la salida”, recuerda el mayor Jorge Montenegro, jefe de la División Especializada de Rescate del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, y quien dirigió las labores de búsqueda de la familia durante una hora y media.
Esta cifra se suma a -al menos- otras treinta personas que se han perdido en los últimos cinco años en distintos bosques protectores de la ciudad como el de la Prosperina, Cerro Blanco y Cerro Azul, según datos de la unidad de Bomberos.
Para Mariuxi Ávila, miembro de Cerros Vivos, este caso fue la gota que derramó el vaso. “Mucha gente llega entusiasmada a querer visitar el bosque, pero aquí no hay senderos definidos, no hay señalización ni mucho menos iluminación y seguridad”, explica.
Ávila menciona que han enviado cartas a todas las instituciones responsables de los problemas del lugar, entre ellas el Municipio, pero no han recibido respuestas concretas.
“Si Cerros Vivos no hace mingas esto es un desastre. Esto debe ser un compromiso y se necesita que el presupuesto y la gestión llegue por parte de las autoridades”, agrega. A pesar de conocer el lugar, dice, al menos cuatro integrantes de la organización se han perdido en el cerro.
El mayor Montenegro indica que él no recomienda realizar estos recorridos, pues sin las precauciones y cuidados necesarios, las personas pueden extraviarse y, en el peor de los casos, salir heridos por los animales o plantas que viven en estos bosques.
“Nos ha tocado salir a buscar a familias, grupos, niños, jóvenes, adultos y hasta ciclistas que ingresan a excursionar a Cerro Blanco o Azul. Incluso los scouts que entran luego ya no saben cómo salir”, precisa.
“Estamos mejorando la gestión”
El director de Ambiente del Municipio, Bolívar Coloma, dijo a EXPRESO que ellos están “mejorando la gestión en los dos bosques en los que tenemos competencia”. Es decir, el bosque protector Paraíso y el Bosqueira, ubicado en el kilómetro 27 de la vía a la Daule.
En los sitios se está implementando un “servicio para el control y vigilancia, prevención ambiental y restauración ecológica en los bosques protectores”, que consiste en instalar señalética informativa y preventiva. Según Coloma, también hay un guardabosque asignado para cada lugar.
Con respecto al plan de El Paraíso explica que se encuentra en revisión interna, ajustándose a los formatos del Ministerio del Ambiente.