La ciencia se empeña en programar células humanas con la idea de que sigan órdenes como regenerar tejidos y curar enfermedades.

Las celulas tambien se hackean

Cuando comemos un dulce, sin importar lo delicioso que sea, nuestro nivel de azúcar se eleva, por lo que el páncreas se ve obligado ha producir más insulina.

La ciencia se empeña en programar células humanas con la idea de que sigan órdenes como regenerar tejidos y curar enfermedades.

Un primer logro apunta a más de cien operaciones obedecidas por un grupo de células y marca el camino de la biocomputación

Cuando comemos un dulce, sin importar lo delicioso que sea, nuestro nivel de azúcar se eleva, por lo que el páncreas se ve obligado ha producir más insulina. Esta es una muestra de cómo el cuerpo y las células que lo conforman funcionan igual que una computadora: reciben la data (el nivel de azúcar) y nos responden (con insulina).

Es por este motivo que científicos de todo el mundo trabajan en hackear las instrucciones que se encuentran en el interior de las células humanas . ¿Cuál es el fin? Que estas sean capaces de responder a direcciones como combatir enfermedades específicas o a fabricar sustancias y moléculas que necesite el cuerpo.

Y ya hay un primer logro. De acuerdo con Wired, un grupo de científicos de la Universidad de Boston y dirigido por el biólogo Wilson Wong, ha podido programar un grupo de células de mamíferos que han obedecido a 113 instrucciones lógicas distintas con una tasa de éxito del 96,5 %.

El proceso es complejo de entender. Es algo como apagar y encender los genes de las células, pero en el camino utilizar una especie de tijera molecular que corte de forma selectiva los fragmentos de ADN para modificarlos y reinsertarlos.

El equipo de Wong aún no ha logrado hacer que estas células modificadas hagan un trabajo de “computación” que sea útil, pero el estudio es un gran avance, pues prepara el camino para la biocomputación más compleja con células.

El siguiente paso será que las entradas lógico-genéticas funcionen con cualquier tipo de células: células de la piel, células del oído y hasta neuronas.

Llegados a ese punto, los científicos creen que podrían programarlas para los desafíos médicos y la lucha contra enfermedades como el cáncer o incluso la posibilidad de mejorar la capacidad de generar tejidos que reemplacen partes del cuerpo dañadas. Suena a paradoja, porque de lo que se trata es de vencer el papel que tiene la naturaleza como ingeniero de “software” de la vida refinando gradualmente el algoritmo de una célula (su ADN). Cuando eso ocurra, y esperemos que ocurra, los límites entre la ficción y la realidad habrán acabado.

Otros blancos

El ‘Biohacking’ o ‘Biología Do It YourSelf’ tiene como objetivo mejorar nuestra condición humana poniendo al alcance de todo el mundo la nanotecnología, la ingeniería genética y los implantes tecnológicos. Los expertos defienden estas prácticas siempre que no pongan en peligro nuestra salud, como puede ser el uso de chips bajo la piel para identificarnos o para medir nuestro nivel de azúcar en la sangre.

La fotosíntesis

Un grupo de científicos del Cold Spring Harbor, en Nueva York, explora posibles rediseños en los sistemas biológicos de las plantas con el fin de modificar el modo en el que realiza la fotosíntesis. Por ejemplo, uno de los factores que limitan la productividad de los cultivos es la incapacidad de la fotosíntesis para utilizar de forma eficaz las altas intensidades de luz durante el mediodía, con una programación esto cambiará.