El denominado Caso Nene, con el que la Fiscalía General del Estado (FGE) investiga un presunto delito de oferta de tráfico de influencias en la Vicepresidencia de la República, terminó con la detención de Francisco Barreiro -hijo de la vicepresidenta Verónica Abad-, tras los allanamientos realizados, en Quito y Cuenca, la mañana de este jueves, 21 de marzo.

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La audiencia de formulación de cargos, que se llevó a cabo la noche de este mismo 21 de marzo en el Complejo Judicial Norte de Quito, terminó con el dictamen de prisión preventiva por 90 días contra Barreiro, tiempo que durará la instrucción fiscal del caso.

Durante la audiencia, el fiscal anticorrupción, Carlos Alarcón, dio detalles del caso Nene y de la detención de Francisco Barreiro. Según el fiscal, el denunciante es un hombre identificado como Romel P., quien habría trabajado un mes en el área de Comunicación de la Vicepresidencia de la República, desde enero de 2024. El denunciante asegura que Barreiro y un supuesto asesor de la Vicepresidenta, identificado como Daniel R., le pidieron dinero por el cargo.

Según Fiscalía, Barreiro y el asesor habrían citado a la supuesta víctima, en enero de 2024, en un hotel de Quito. Ahí le dijeron que su sueldo sería de USD 3.200 y que debía entregar USD 2.000. Tras una negociación, llegaron al acuerdo de que cada mes Romel P. entregaría 1700 dólares en efectivo a Barreiro. Además, le hicieron firmar una letra de cambio por más de 30 mil dólares, según el canal de televisión Teleamazonas.

El fiscal Alarcón añadió en la audiencia de formulación de cargos que tienen varias pruebas, como fotografías de la letra de cambio, audios y videos. 

El Gobierno de Daniel Noboa, a través del Ministerio del Interior, se pronunció con respecto a la investigación del caso Nene en el que fue detenido el hijo de la vicepresidenta de la República.

En un comunicado señaló: "Este Gobierno, a través de la Secretaría de Política Pública Anticorrupción, está firmemente comprometido con la prevención y erradicación del delito, y apoya la persecución de todo acto de corrupción por lo que mantiene una coordinación y trabajo articulado con este propósito, demostrando cero tolerancia a la corrupción venga de donde venga".

De su parte, la vicepresidenta, Verónica Abad, no ha emitido ningún tipo de pronunciamiento.

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