Junto a la Cruz del Papa, en el parque La Carolina, norte de Quito, una hilera de 20 carpas tiñó de rosado la zona. Eran consultorios móviles de la Fundación Poly Ugarte, quien promovió la mañana de este sábado 22 de octubre, desde las 08:00, la campaña “Ya es hora Quito, tócate”.

A este evento se dieron cita cientos de mujeres. Algunas llegaron acompañadas de sus familiares, otras solas, pero todas con un mismo fin: realizarse un examen preventivo de cáncer de mama.

A nivel mundial, esta enfermedad es la primera causa de muerte en mujeres, superando incluso al de pulmón. Este silencioso atacante se diagnostica con más regularidad a la hora de realizar un chequeo de rutina.

Este cáncer representa 1 de cada 3 nuevos cánceres femeninos anualmente.

Ante estas cifras, Poly Ugarte, activista y sobreviviente de este mal, comenta que a través de la campaña busca atender a 10 mil mujeres, realizando inicialmente un examen primario y, si en caso se encontrara alguna anomalía, realizar una ecografía o mamografía. Todo es gratuito y con fines preventivos.

“Científicamente no se conoce aún por qué se da la enfermedad, entonces lo que le puede salvar la vida a una mujer es la detección temprana. Si evitamos que la bolita se vuelva un cáncer entonces podremos salvar más vidas”, agrega.

Asimismo reveló que, de acuerdo a las cifras obtenidas en estos 16 años de proselitismo social que lleva adelante, se ha identificado que el 96 % de las pacientes logran salvarse de la muerte e incluso de perder su seno si se hacen un autoexamen a tiempo.

También indicó que gracias a iniciativas como esta, a nivel nacional ha sido posible atender, sin costo alguno, a un millón 200 mil mujeres.

“Para llegar a la capital con este programa, la primera dama de la Nación nos colaboró y pudo integrar al IESS, Ministerio de Salud Pública para que a las afiliadas se les entregue un turno para mamografías o ecografías. También realizamos charlas educativas con más de 13 mil personas, en centros educativos privados, municipales y fiscales”, acota Ugarte.

La finalidad de este proyecto social se enfoca además, en educar a la sociedad para prevenir y no curar.